Mucho ha llovido desde que el chocolatero griego Leonidas Kestekides iniciase un ascenso imparable en 1913. Fue en la Exposición Universal de Gante, en esa Bélgica experta en chocolate, donde este humilde artesano comenzó a sobresalir. Fue en ese momento cuando comenzó a redoblar esfuerzos produciendo chocolate, cuando su nombre se convertiría poco a poco en sinónimo de buen producto.
Con un negocio más que floreciente, en 1935 la empresa fue heredada por su sobrino y el objetivo de convertirse en una referencia internacional en la elaboración de buen chocolate belga se convirtió en prioridad. Es en esta época cuando la imagen del rey Leonidas de Esparta se tomó como icono en sus envoltorios y cuando la chocolatería, que vendía sus especialidades a través de una ventana, comenzó a crecer y crecer.
Actualmente, la compañía tiene más de un millar de tiendas repartidas en varios países del mundo, entre ellos España, en el que destaca una singular boutique en el corazón del barrio de Salamanca de Madrid, en la calle Padilla número 61.
En Leonidas Madrid se venden más de un centenar de especialidades elaboradas en la casa madre, situada naturalmente en Bélgica, desde donde cada año salen alrededor de 180.000 toneladas de chocolate. Delicias que tienen en común, además del saber hacer que las hace posibles, dos rasgos fundamentales: su cubierta y su relleno. La primera siempre será de chocolate blanco, negro o con leche, mientras que el relleno puede optar por la mezcla de chocolate puro con nata, así como por pralinés, licores y otros rellenos más creativos.
Entre sus estanterías y mostradores encontramos un gran surtido de tabletas de diferentes sabores, chocolates para untar, otros para prepararlos a la taza, bâtonetes de naranja recubiertas de chocolate, muñecos de nieve hechos de cacao, otras representaciones como la del Maneken Pis y un largo etcétera de bombones. Una gran y exquisita variedad de chocolate en Madrid, en plena milla de oro, obra de los mejores maestros chocolateros belgas. Leonidas estaría orgulloso, estamos seguros.