No estarías aquí si no te gustara mucho -muchísimo- el café. Y nosotros tampoco si no fuera para traerte el listado definitivo que promete el titular de este artículo: el de los seis mejores cafés del mundo y que pertenecen a la variedad Arábica. Recordemos que según el origen de la planta existen dos variedades de café, la Coffea arabica (café Arábica) y la Coffea caneophora (café Robusta), siendo la primera la más apreciada y también la más cara. Según cuenta la historia y el origen del café, estas variedades son cultivadas en laderas de volcanes y altas montañas de hasta 2.200 metros de altitud y en las mejores cosechas de Centro y Sudamérica. ¡Vamos con el ranking!
1. Café de Indonesia
Según los expertos, el mejor café del mundo es el que se produce en Indonesia, en concreto la variedad de café Civet, también llamada Kopi Luwak (‘café de civeta’ traducido del indonesio). Se trata de un café muy apreciado y, de hecho, lleva años sin bajarse del ranking como uno de los más exquisitos y cotizados del mercado. ¿Y qué le hace tan especial? Que se obtiene moliendo los granos de café extraídos de los excrementos de un animal, la civeta o Luwak.
Según explican los expertos, la digestión de este animal otorga un aroma muy singular a los granos del café gracias a la modificación química que producen las enzimas. No los digiere, por lo que en los excrementos estos se encuentran enteros. Posteriormente, se limpian a mano y se muelen de forma artesanal. El resultado es una bebida de sabor fuerte, con una acidez media, toques aromáticos y notas de caramelo y chocolate muy intensas. Las expectativas de quienes lo prueban son muy elevadas, claro, aún más sabiendo que su precio en España ronda entre los 100 y los 500€ el kilogramo. Sin embargo, no a todo el mundo le gusta y hay quien incluso lo encuentra demasiado fuerte.
2. Café de Etiopía
Afirmar que el café de Etiopía se encuentra en el ranking de los mejores del mundo no es ninguna sorpresa si te decimos que fue precisamente allí, en concreto en la provincia de Kaffa, donde se hallaron las primeras plantaciones de cafeto de la historia. Según los expertos, el café etíope reúne unas condiciones que le hacen único en cuanto a aroma y sabor, y esto es gracias a que se cultiva en las zonas de mayor altitud del país, donde hay más humedad y el suelo es más fértil.
Las condiciones ambientales que se dan en la cuna del café consiguen que esta variedad resulte especialmente sabrosa, pero a la vez delicada, con notas frutales y especiadas, y una acidez muy equilibrada. Se cultiva en tierras muy fértiles situadas a una altitud de 2.000 metros, y con un grado de humedad muy óptimo para su crecimiento. Además de todo ello, no olvidemos que el café etíope cuenta con un valor cultural e histórico únicos, pues allí se situaron los primeros bebedores de café del mundo.
3. Café Blue Mountain de Jamaica
Nuestra siguiente parada es Jamaica, en concreto las famosas Montañas Azules situadas al este del país caribeño, alrededor del Pico Blue Mountain (2.256 m) o Pico Montaña Azul. Aquí se cultiva uno de los mejores cafés del mundo, el café Jamaica Blue Mountain (JBM) y que se distingue por contar con el sello de certificación protegida a nivel mundial, pues no todo el café que se produce en Jamaica pertenece a esta exclusiva variedad.
En estas cordilleras, la planta del cafeto encuentra unas condiciones privilegiadas para crecer y dotarse de sus características únicas: temperaturas suaves, suelo volcánico, lluvias abundantes y mucha nubosidad. Todo ello, sumado a la recolección manual, la producción en cantidades pequeñas y al uso de abonos 100% orgánicos dotan al Blue Mountain de una calidad premium.
Flying Bean CoffeeEl exhaustivo control de calidad es otro de los factores que hacen de esta variedad una de las mejor valoradas del mundo. Una vez que los granos han sido procesados y están en su punto de maduración “verde”, se clasifican manualmente por tamaño y forma, seleccionándose solo los mejores y reservándose para uso doméstico aquellos que presentan algún defecto. En cuanto a su sabor, el café Jamaica Blue Mountain es ligero, suave y con un aroma inconfundible.
4. Café de Kenia
¿Sabías que, gracias a su sabor y aroma, el café de Kenia es conocido por muchos como el champagne de los cafés? Cultivado en Monte Kenia, en la región de Cimazul, esta variedad tan apreciada crece a una altura de 2.000 metros sobre el nivel del mar y en suelo volcánico fértil, y se dice que se trata de uno de los más exóticos por los aromas y matices que le otorga el clima del lugar.
Cafés GuilisEl clima cálido y húmedo debido a las constantes precipitaciones de la zona hacen que esta planta dé frutos de cafeto muy aromáticos y de gran calidad. Nos encontramos ante una bebida 100% Arábica, con cuerpo, sabor intenso pero agradable al paladar y una acidez más alta que las anteriores que recuerdan a las del vino.
5. Café de Colombia
¿Quién no ha escuchado alguna vez que el café colombiano es el mejor del mundo? A pesar de no ser el pionero en producir ni en exportar café en el mundo, es cierto que Colombia reúne algunas características que hacen que su café destaque entre los mejores del mundo: su clima, sus sistemas montañosos, su producción manual, la calidad del grano, el cultivo del tan apreciado café arábico, etc.
Los granos del café colombiano se caracterizan por sus toques afrutados y por tener un sabor único en función de la zona concreta donde se cultive. Si por algo triunfa el café de Colombia no es por la potencia de su sabor, sino más bien al contrario, por ser una bebida suave, ligeramente dulce, delicada, cero amarga y muy versátil a la hora de disfrutarlo al gusto del consumidor.
Otro de los éxitos que se le reconocen al café colombiano es el de haber popularizado el consumo de café en países como Estados Unidos, y más tarde, Europa. Desde Colombia se llevaron a cabo importantes campañas que, junto con el auge de las cafeterías y tiendas de café que ellos mismos emprendieron en ciudades como Nueva York, hicieron que el café colombiano ganara fama y reconocimiento, considerándose así uno de los mejores.
6. Café de Nicaragua
Entre el océano Pacífico y el Caribe encontramos otro de los mejores cafés del mundo, el café de Nicaragua. Se dice que los granos que allí se cultivan son de calidad superior debido, sobre todo, a las condiciones del clima y del suelo: tierras fértiles, cultivos en sombra y lluvias constantes que aportan mucha humedad a la planta.
No nos olvidamos de la importancia de la altitud a la hora de valorar la calidad premium de este café, pues es cultivado en altitudes que rondan los 1.300 y los 1.700 metros de altura, dotándolo dela calificación internacional “SHG” (Strictly High Grown), una de las más elevadas.
El grano del café de Nicaragua no solo destaca por su sabor exquisito y su intenso aroma, sino por ser el más grande del mundo, de ahí que se le conozca también como café elefante, una singularidad que llama mucho la atención y es muy apreciada entre los más entendidos del café. Una vez servido, esta bebida presenta una acidez suave, cuerpo medio a suave, y sabores equilibrados que recuerdan a la nuez con notas de vainilla.
Si leíste nuestro artículo sobre el origen y la historia del café, sabrás que es la tercera bebida más consumida del mundo después del agua y el té, y el segundo producto más comercializado a nivel internacional, solo por detrás del petróleo. No es de extrañar que cada vez más personas quieran saber más acerca de esta joya gastronómica, y que afinen sus sentidos a la hora de apreciar el sabor y el aroma de un buen café. Ahora que ya conoces cuáles son los mejores granos de cafeto del mundo, ¿te atreves a probarlos? ¿Conocías alguno de ellos?