La pilota valenciana, deporte autóctono arraigado hasta el tuétano en el legado de muchas poblaciones autóctonas, viva una suerte de segunda juventud tras coquetear con su extinción. Un latido todavía por refrendar, bajo el deseo de poder recuperar colectivamente una actividad popularizada desde tiempos ancestrales.
Siguiendo esa estela el que siempre ha sido escenario mítico de este deporte, el Pelayo Gastro Trinquet, ha experimentado una renovación en sus términos, un intento de acercarlo a un nuevo público y de entroncarlo con usos asociados.
El Pelayo acarrea más de 150 años de historia, uno de los recintos más antiguos de España. Desde hace apenas un par de meses su antiguo bar, singularmente lugar de acceso a la pista de juego, ha evolucionado en restaurante. La apuesta, seria y bien acogida, procura convertir ese acceso al deporte en un lugar de entre usos, en el que un almuerzo fugaz hile con una partida de pelota, que un grupo de amigos convoque su comida para a posteriori seguir las evoluciones deportivas…
Por fortuna la propuesta anda bien lejos de los restaurantes temáticos deportivos. En las antípodas de aquello el proyecto tiene una voz propia, está trabajado por dos tipos reconocibles: Pablo Margós y Juan Fernández Caraballo.
Margós, unas de las caras prometedoras de la cocina sencilla valenciana, es el chef del restaurante Las Bairetas de Chiva, uno de los templos del arroz en el interior de la provincia. Es un cocinero derivado de la conciencia por el legado y la búsqueda de su adaptación a nuevas técnicas.
Ellos resumen así su desafío: "una experiencia de inmersión en el mundo de la pilota valenciana, el trinquet, sus mitos y tradiciones, dentro del imaginario colectivo de nuestra propia cultura. Es aquí donde radica el mayor reto, en dar una oferta gastronómica propia y de autor de esos clásicos como la tonyina, el abaecho o la titaina con un formato joven y actual".
El interiorismo, a partir del vínculo entre iconografía de la pilota y las formas en madera, supone una transición para el espectáculo que uno podrá ver después, atendiendo a los lances de los jugadores.
Si el deporte de la pilota tiene su diferencial en la fuerte raigambre al entorno, en la popularidad coloquial, la cocina de Margós ha seguido, lógicamente, los mismos cauces. Platos muy reconocibles, buen trato, propuestas directas. Sepia con mahonesa, ajo arriero con garrofó, raviolis de anguila encebollada con all i pebre, blanco y negro para untar, tostas de Almussafes y de escalivada a la brasa, bocadillos con nombres de jugadores legendarios (Genovés, Rovellet, Eusebio, Fredi…), arroces contundentes de bullit con figatell o de conejo. Para acabar, un shot de mistela.
Todo parece lógico y razonable.
Pelayo Gastro Trinquet
Calle Pelayo, 646007 Valencia
963514156
pelayogastrotrinquet.es
Mediterránea, Valenciana
20€-50€
