La fabada asturiana, junto a la sidra o el cachopo, se ha convertido en uno de los elementos imprescindibles dentro del recetario del Principado. Un potaje con solera y sin artificios que basa su excelencia en una cremosa faba asturiana, Indicación Geográfica Protegida, un buen compango y horas al fuego, donde el colágeno, almidón y grasa hace su propia magia. A continuación, las mejores mesas de Asturias para disfrutar de la fabada.
Casa Gerardo
Ubicado en la tranquila aldea de Prendes, a pocos kilómetros del cabo Peñas, Casa Gerardo es una de las instituciones de la restauración asturiana. Marcos Morán, quinta generación de una de las familias hosteleras con más nombre del Principado, desarrolla en esta casa de comidas una vanguardista propuesta que aúna lo mejor de la cocina cosmopolita con el inconfundible toque tradicional que no puede faltar. Esto le ha permitido conseguir una estrella Michelin que luce con orgullo a la entrada de esta fonda donde la fabada de Prendes, con faba asturiana kilómetro cero y compango de la zona hacen que sea una de las mejor valoradas dentro y fuera de Asturias. Más de 140 años de tradición que se saborean en este plato tradicional, sencillo pero lleno de historia.
Carretera AS-19, km 9. Prendes.
El Llar de Viri
La ribera del río Nalón destaca por ser una de las huertas más preciadas de toda Asturias. Esto explica por qué los restaurantes, casas de comidas y chigres de la zona cuentan con hortalizas, legumbres y verduras de primerísima calidad. Así lo entienden en El Llar de Viri, una coqueta casa de comidas que abrió sus puertas en 1996 y que, desde hace más de veinticinco años, ofrece una de las mejores fabadas de Asturias. En 2013, su potaje fue galardonado como Mejor Fabada del Mundo y no es para menos; Elvira Rodríguez, popularmente conocida como Viri, es una de las reconocidas guisanderas del Principado y su saber hacer la ha hecho valedora de este título. En su cocina se guisa, cuece y tritura sin prisa, con una filosofía que hoy se denominaría slow-food. Ha sido la paciencia innata del buen hacer entre fogones lo que le permitió mantener durante años el sello Bib Gourmand de la guía gala Michelin.
Calle Trasquilos, 20. San Román de Candamo.
Casa Telva
La cocina de mercado tiene su referente en el restaurante Casa Telva, en Siero. Rodeado de palacios y casas solariegas, Casa Telva es un espacio gastronómico que pertenece a la red «Mesas de Asturias» lo que garantiza una calidad suprema y un producto de cercanía, que cambia según las estaciones y que se basa en el recetario popular para mostrar su mejor versión. Su plato de cuchara más emblemático, la fabada asturiana, se alzó como finalista en el certamen gastronómico a Mejor Fabada del Mundo este 2023; como sugerencia, no dejen de probar sus fabes con setas silvestres, un plato que nos trasladará a los fríos días del otoño.
Carretera General Leceñes, 4. Valdesoto.
Casa Pedro
¿Quién dijo que la tradición y la fusión no pueden ir de la mano? Así lo entiende Christian de Diego, actual propietario de esta coqueta casa de comidas con vistas a los Picos de Europa. Alejada del urbanita y turístico centro de Cangas de Onís, Casa Pedro ofrece una reconversión de los pucheros, estofados y postres del recetario asturiano, llevando a otro nivel las elaboraciones más sencillas. Si hablamos de su fabada, encontraremos una buena alubia, cremosa y que no suelta la piel con facilidad. El compango, criado en el entorno, demuestra que la clave de una buena fabada son sus sacramentos, donde el tocino, la morcilla y el chorizo forman una Trinidad gastronómica imprescindible.
Carretera PR-5, s/n. San Juan de Parres.
Casa Eutimio
Conservera, hotel y restaurante. La familia Busta-Rosales demuestra que no es necesario realizar grandes artificios entre fogones si el producto es bueno y las manos que preparan las comandas saben hacer maravillas. Casa Eutimio es un gastronómico que no debe perderse en una de las localidades marineras más turísticas de Asturias. Aunque a veces es complicado saber dónde comer en Lastres, Casa Eutimio es parada obligatoria para aquellos que disfrutan de la buena mesa pudiendo saborear mar y montaña en un único espacio. Su fabada bebe de las mejores plantaciones de Villaviciosa, con fabas grandes y cremosas que sueltan su almidón para entremezclarse con el compango, el embutido tradicional, de casa. Esta magia le ha permitido alzarse como finalista en el concurso Mejor Fabada del Mundo 2023.
Calle San Antonio, s/n. Lastres (Colunga).
La Sauceda
El restaurante La Sauceda es otro ejemplo de cómo alejarse de los puntos más turísticos de Asturias permite encontrar sorpresas gastronómicas de referencia. La Sauceda, ubicado en un pequeño pueblo de Peñamellera —a los pies de los Picos de Europa— presume de haber logrado ser la Mejor Fabada del Mundo en 2019. Un mérito que se fundamenta en la buena calidad de sus legumbres, compango y, por supuesto, la paciencia a la hora de crear este tradicional plato. Sin ollas a presión, las antiguas «potas» de la abuela son la clave para lograr un potaje gelatinoso, digno y lleno de sabor. Quizás el secreto sea que las fabas se recogen de la propia huerta del restaurante, regada por las cristalinas aguas de los Picos de Europa.
Buelles, s/n. Peñamellera Baja.
Casa Xisco
En el corazón del valle de Mestas, en Llanes, Casa Xisco mantiene la esencia del bar-tienda y estanco que fue en su momento. Cocina tradicional, donde el menú no ocupa demasiado espacio ya que los asiduos saben que no faltarán los tortos, los potajes —donde tanto la fabada asturiana como les verdines con langostinos ocupan un papel protagonista— y los guisos de carne al más puro estilo tradicional. Más de cien años entre fogones que se traducen en una quinta generación al frente del negocio familiar y donde, alejados de las estrellas y constelaciones de las guías, crean arte entre fogones. Luce con orgullo su Solete de la Guía Repsol que alumbra una casa de comidas poco frecuentada por turistas pero que se mantiene entre los imprescindibles de los asturianos, quienes saben dónde comer en Llanes sin caer en trampas.
Mestas de Ardisana, s/n. Llanes.
Fabas de Indicación Geográfica Protegida, compango artesanal, cariño y buenas «potas» heredades. Es difícil encontrar una fabada que no reúna la mejor de las calidades pero estas siete fondas se abren al Olimpo de uno de los platos más conocidos, consumidos y reproducidos del recetario asturiano. Una visita al Principado será el culmen perfecto a este pequeño viaje gastronómico de cuchara y siesta garantizada.
