¿A quién no le gusta el chocolate? El fruto del cacao quizás sea uno de los alimentos más apreciados del planeta por niños y adultos, porque gusta por igual a todo el mundo, independientemente de la edad, el género o el país de procedencia. La pastelería sería impensable sin la aportación del chocolate.
Mucha técnica, conocimiento e imaginación darán lugar a postres maravillosos. Como la tarta de chocolate, un dulce universal que nunca puede faltar en las cartas de restaurantes y por supuesto en pastelerías y confiterías. Existen verdaderos especialistas que hacen magia con bizcochos, mousses y ganaches, coberturas espejadas y deliciosas texturas. Afortunadamente hay muchos lugares recomendables en Madrid donde comer una riquísima tarta de chocolate o adquirirla para llevarla a casa y hacer feliz a cualquiera que la vaya a probar. No hace falta que sea tu cumpleaños para darte el lujo de meter la cuchara en una tarta bañada por la golosina favorita de Moctezuma. Como éstas que te proponemos. Hay más, claro, pero estas nos gustan mucho.
La mejor tarta de chocolate del mundo, made in Portugal
El portugués Carlos Braz tuvo un restaurante de cocina tradicional en Lisboa hace años y fue allí donde empezó a hacer su famoso bolo de chocolate. Tal fue el éxito que en 2002 abrió una pastelería para vender exclusivamente esa tarta. Ocho años más tarde llegaron a Madrid de la mano de dos españolas, que se asociaron al pastelero para distribuirlas en la capital de España. La mejor tarta de chocolate del mundo no lleva harina, es crujiente y melosa y sabe intensamente a cacao. Las preparan con dos porcentajes (70% y 53%) para 8 o 14 raciones. Se requiere encargarla con 24 horas de antelación.
Calle Alcalá, 89.
Monroe Bakes, la tarta de la pastelera revelación MF 2023
La japo-sevillana Noelia Tomoshige se dio a conocer cuando el año pasado fue nombrada Pastelera Revelación en Madrid Fusión. Su simbiosis de la pastelería francesa con ingredientes nipones y españoles ha conquistado al público de Getafe, donde tiene su obrador, y a todo Madrid. En su pastelería llena de encanto vende delicados dulces que cambian en función de la estación, y entre ellos no puede faltar su entremet (tarta) de chocolate y galleta, con galletas María remojadas en leche, cremoso y mousse de chocolate. Para 6-8 personas, se debe encargar con una semana de antelación.
Avenida de la Paz, 21. Local 1. Getafe.
Fismuler, una tarta de inconfundible sello italiano
70% de cacao y gianduja (crema de chocolate con avellanas y/o frutos secos) a partes iguales, junto a la mantequilla, azúcar moreno, huevo y harina de almendra son los ingredientes principales de una de las tartas de chocolate de restaurante más aclamadas de Madrid. Su artífice, Nino Redruello, comanda la cocina de éste y del resto de restaurantes del grupo La Ancha, y en todos tienen en carta este delicioso postre: una tarta fluida y muy achocolatada, que se vende tanto con el otro gran hit de la casa: la tarta de queso. Un consejo: probar ambas.
Calle Sagasta, 29.
La Duquesita, la propuesta del reconocido Oriol Balaguer
En 2016 se hizo cargo de esta preciosa pastelería centenaria el multi premiado pastelero Oriol Balaguer. Experto chocolatero, sus bombones y postres a base de cacao están considerados entre los mejores de España. Trabaja este productos como pocos, conoce y maneja todas las técnicas y sabores, lo que le lleva a ofrecer tres tartas de chocolate distintas: la de cuatro texturas (crujiente, bizcocho, mousse y ganache) elaborada con un 70% de cacao es nuestra favorita. Pero también prepara la Sacher y la llamada Tentación, con chocolate 40% y base de galleta. Deben encargarse con un día de antelación.
Calle Fernando VI, 2.
Moulin Chocolat, cuatro tartas con el chocolate de protagonista
Esta pastelería junto a la puerta de Alcalá es una de las direcciones imprescindibles de la ruta golosa madrileña. Detrás está un conocido pastelero, Ricardo Vélez, que junto a su hermana Puy, son los responsables de los dulces, bollería y pasteles de esta casa, en la que no pueden faltar las tartas de chocolate, en plural. Hasta cuatro opciones (Tour's choco, Pralyn, Madagascar-limón y brownie) protagonizadas por el cacao entre las que es difícil decidirse. Pero una de las más exitosas —por demandadas— es la llamada Pralyn, con una base de bizcocho de almendra, cremoso de gianduja, crujiente de nougatine de avellanas, mousse de chocolate con leche y glaseado brillante guanaja al 70%. Entra directamente por los ojos.
Calle Alcalá, 77.
Balbisiana, tartas muy legales y caseras
Paula Babiano era abogada pero siempre había hecho repostería de forma autodidacta, con sus abuelos. Al final en 2022 cambió su afición por su profesión. Balbisiana es una pastelería donde las tartas, 100% artesanales, se hacen al momento, en el día, «como las de casa», dice. Entre sus hits, La tarta de la abuela, de galletas maría con mousse de chocolate al 55%. Con una ganache de cacao por encima, la termina con tres decoraciones (lacasitos, perlas de chocolate o frutas y flores). Además elaboran también una apetecible tarta coulant, cuyo interior se derrite al partirse, y una tercera cuyo nombre lo dice todo: Muerte por chocolate, con capas de trufa en el interior.
Calle Velázquez, 55.
Mo de Movimiento, la chococake sostenible
Desde que abrió en 2020 es un proyecto singular, que va más allá de lo meramente gastronómico. Y es que el consumo consciente, la sostenibilidad y la integración social están en el argumentario de este restaurante. Todos los productos que utilizan son ecológicos, como su afamada tarta de chocolate eco al 70% y procedente del comercio justo. Fluida en el centro, con el azúcar medido y un inconfundible sabor a chocolate amargo: para chocoadictos.
Calle Espronceda, 34
Carbón, con masa sable
El antiguo Carbón Negro del barrio de Salamanca, reconvertido simplemente en Carbón, sigue teniendo en la brasa el leitmotiv en torno al cual gira toda su cocina. Carnes, pescados y verduras pasan por la acción directa del fuego. Pero su jefe de cocina, Gonzalo Armas, tiene un postre que nunca pasa desapercibido: su tarta de chocolate. La prepara con una cobertura del 65%, y emplean el cacao unido a una masa sable, además de en la mousse cocida del interior.
Calle Juan Bravo, 37.
Lhardy, una creación de Ricardo Vélez
Desde que el pastelero Ricardo Vélez y su equipo se hicieron cargo de la propuesta dulce de la centenaria pastelería Lhardy (en manos, como el restaurante, del grupo Pescaderías Coruñesas) todos los productos de repostería y las masas que se ofrecen en este encantador espacio han cambiado notablemente, y para bien. Para los chocolateros más que recomendable su tarta de virutas de chocolate que se puede adquirir para llevar o tomar in situ. Lleva bizcocho de chocolate mojado en un almíbar de ron Havana 7 años, trufa de chocolate guanaja 70%, glaseado de chocolate, perlas de cacao y una decoración exterior completa a base de virutas de guanaja 70%.
Carrera de San Jerónimo, 8.
Lobito de Mar, chocolate negro para llegar a buen puerto
Es uno de los restaurantes del grupo Dani García, cuyo concepto, rendido a los productos del mar, se ha traído desde Marbella, donde abrió el primero de los locales con este nombre. Andalucía y el Mediterráneo en la base, abierto a numerosas propuestas con el toque del célebre cocinero, que en el apartado dulce apuesta por su solicitada tarta de chocolate negro al 70%, que se elabora a diario, muy cremosa y de sabor intenso.
Calle Jorge Juan, 10.
