Mal año para Cantabria en la nueva Guía Michelin 2024 que no solo no consigue ninguna novedad sino que ve desaparecer contra pronóstico la estrella de El Nuevo Molino por decisión de los inspectores. Así las cosas, la región contará con 5 restaurantes en la guía francesa: el triestrellado Cenador de Amós y los restaurantes El Serbal, La Bicicleta, La Casona del Judío y Solana.
Restaurantes de Cantabria con tres Estrellas Michelin 2024
Cenador de Amós, Villaverde de Pontones
Cenador de Amós es uno de los 15 restaurantes españoles con 3 estrellas Michelin. Jesús Sánchez es el cocinero que ha hecho posible el hito logrando las estrellas en 1995, 2016, 2020. Además, el restaurante posee una estrella verde. Sánchez, de origen Navarro, ha celebrado 30 años en esta su casa, rindiendo a través de su cocina un sincero homenaje al entorno. El restaurante se encuentra en el edificio Casa-Palacio Mazarrasa de Villaverde de Pontones. Marián Martínez, es la jefa de sala y pareja del chef. Sánchez dirige también el restaurante Amós en el hotel Villa Magna de Madrid. En 2022 fue galardonado con el Premio Nacional de Gastronomía otorgado por la Real Academia.
Restaurantes de Cantabria con una Estrella Michelin 2024
El Serbal, Santander
El restaurante El Serbal se encuentra en el emblemático barrio de Puertochico en Santander, en plena playa de El Salinero, y ha sido un referente de la alta cocina desde su apertura en 1999. Propiedad de Rafael Prieto, al frente de los fogones encontraremos a José Ramón Bustamante, cocinero de raíces cántabras y mexicanas, quien apuesta decididamente por los excelentes pescados del mar Cantábrico – que cantan en la propia mesa como muestra de su frescura así como por los cortes de carnes de raza Tudanca, dos muestras de su confianza infinita en los mejores productos locales. La estrella Michelin luce en su entrada desde hace 20 años, pues la obtuvo en el año 2003. En la planta baja del edificio podemos encontrar un restaurante bistró más informal y accesible, Querida Mar, al que se suma también Querida Margarita.
La Bicicleta, Hoznayo
La Bicicleta abrió sus puertas en 2011 gracias a la voluntad de Cristina Cruz y Eduardo Quintana, formados en casas como el mítico Zuberoa, y él además ex ciclista. Lo hizo en una casona rehabilitada del siglo XVIII de la localidad de Hoznayo como una casa de comidas donde parar y reponer fuerzas en el viaje, pero pronto descubrieron que lo suyo era mucho más que una parada rápida para reponer fuerzas. En 2018 la Guía Michelin les premió con su estrella, que lucieron junto a una estrella verde por su trabajo sostenible con el medio ambiente que este año han perdido. Su cocina se caracteriza por el enfoque en productos de temporada adquiridos a productores cercanos y, en la medida de lo posible, ecológicos, algunos incluso de la huerta familiar. Los platos resaltan los sabores auténticos del mar, la tierra, el campo y la montaña, el contexto donde se mueven cada día. Toque viajero
La Casona del Judío, Santander
La Casona del Judío, bajo la dirección del chef Sergio Bastard, es un restaurante abierto en 2012 que consiguió en la edición 2022 una estrella Michelin, reconociendo así el talento del chef formado en la Escuela de cocina de Luis Irizar al tiempo que estudiaba Derecho. En este espacio se fusionan la cocina moderna y la tradición, aprovechando al máximo los productos locales y los mariscos únicos del Mar Cantábrico. Situado en un imponente edificio del siglo XIX en el Barrio de Monte de Santander, una antigua casona indiana, es el escenario perfecto para desarrollar una cocina que además se ejecuta a través de prácticas responsables y conscientes que le han valido también una estrella verde.
Solana, Ampuero
Ignacio Solana es la cuarta generación que dirige la cocina de este restaurante familiar a escasos metros del Santuario de La Bien Aparecida, patrona de Cantabria. Ignacio e Inma Solana, cocinero él y sumiller y jefa de sala ella, además de hermanos, ofrecen menús que navegan entre tradición y el vanguardismo, siempre con el punto de sosiego necesario para saborear y disfrutar del paisaje de montaña en el que se encuentran. Ignacio recibe la ayuda de su madre Begoña en la elaboración de los platos más clásicos y tradicionales, manteniendo vivo el legado histórico más sabroso de la familia. Ganaron la estrella Michelin en el año 2011.
