Como ocurre con muchas frutas tropicales, es esencial saber cortar, pelar y preparar el mango para no desperdiciar nada de pulpa y aprovechar al máximo esta fruta tropical. Los usos culinarios del mango van mucho más allá de los postres... Ya sea para para preparar una deliciosa ensalada de salmón ahumado, mango y aguacate, para un cremoso gazpacho de mango o para cualquier receta con mango dulce, pelarlo bien te permitirá extraer la pulpa de manera eficiente y sin desperdicio, asegurando además que cada plato tenga la mejor presentación.
Utensilios necesarios para pelar un mango
Para pelar un mango fácilmente necesitarás las herramientas de pelado que te faciliten la tarea. Estos son todos los utensilios que necesitarás para seguir las distintas técnicas, aunque en función de cual elijas podrás ahorrarte unos cuantos:
- Cuchillo: un cuchillo pequeño o mediano con una hoja afilada es esencial para cortar el mango alrededor del hueso y poder separar la pulpa.
- Tabla de corte: asegúrate de utilizar siempre una tabla de corte, y lo más importante, ajustarla bien a la encimera antes de manipular la fruta. Así podrás hacerlo con menos riesgo.
- Pelador de frutas: si alguna vez te has preguntado si se puede pelar un mango sin cuchillo, te interesará saber que una buena opción para retirar la fina piel del mango, es hacerlo con un pelador de frutas, especialmente si quieres pelarlo antes de cortarlo.
- Cuchara: una cuchara sopera grande y resistente es ideal para extraer la pulpa del mango después de hacer los cortes en forma de rejilla. Es el método más útil para obtener cubos de mango rápidamente.
- Cuenco: Ten a mano siempre un recipiente para recoger la pulpa de mango mientras lo estás preparando.
- Vaso: una de las técnicas que te enseñaremos requiere usar un vaso, si es un vaso alto y ancho mejor.
Cómo preparar un mango para pelar
Antes de pelar el mango es importante prepararlo asegurándote de que esté limpio y listo.
Lava el mango
Comienza enjuagando bien la fruta con abundante agua bajo el grifo. No necesitarás aplicar ningún producto, el agua será suficiente para eliminar cualquier residuo que pueda haber en la piel.
Seca el mango
Una vez lavado, siempre recomendamos secar bien el mango con un paño limpio o con papel de cocina. Esto es fundamental para evitar que se deslice por la tabla mientras lo cortas.
Identifica dónde está el hueso
A diferencia de otras frutas, el mango tiene un hueso grande y plano justo en el centro. Para localizarlo, nuestro truco es fijarnos bien en la forma de la fruta, ya que en la parte más ancha y plana del mango es donde está el hueso.
Corta los lados del mango
Coloca el mango sobre la tabla (siempre bien fijada a la encimera), y con un cuchillo bien afilado, corta a lo largo de ambos lados del hueso. Así obtendrás dos partes iguales de pulpa. Te recomendamos que hagas los cortes lo más cerca posible del hueso para obtener la mayor cantidad de fruta. Después puedes cortar los bordes restantes de la fruta para sacarle el máximo provecho.
Métodos para pelar un mango correctamente
Aunque puedas pensar que pelar un mango sin mancharse es complicado por su forma y textura, verás que aplicando cualquiera de estas técnicas de pelado será sencillo y eficiente. ¿Cómo pelar un mango fácilmente?
Con un pelador
Es la manera más fácil de pelar un mango y la mejor si lo necesitas entero y sin piel. Sólo tendrás que sujetar el mango firmemente con una mano y con la otra deslizar el pelador por la superficie de la fruta, comenzando en la parte superior hasta llegar a la base. Ve girando el mango mientras vas retirando la piel en tiras.
Con una cuchara
Es una técnica ideal cuando necesitas extraer la pulpa de forma rápida y sin complicaciones. Coloca el mango sobre la tabla y corta los lados como hemos explicado antes. Una vez tengas las dos partes laterales con la pulpa, ráspalas para separar la carne de la piel.
Con un vaso
¿Cómo pelar un mango con un vaso? Al igual que con el método anterior, primero tendrás que cortar los laterales del mango. Cuando las tengas, coloca uno de los trozos del mango en el borde el vaso con la piel hacia afuera. Mientras presionas hacia abajo, la piel quedará fuera del vaso y la pulpa dentro. Es importante que el borde del vaso esté en contacto con la línea donde la pulpa se une a la piel.
El método cuadrícula
Basado en el mismo tipo de pelado que se hace con cuchara, este método además te permitirá extraer la pulpa cortada en daditos perfectos. Una vez tengas separadas ambas partes del mango, haz cortes longitudinales y transversales en la pulpa de cada mitad formando una cuadrícula. Después bastará con que le des la vuelta a la piel del mango como si fuera un calcetín de manera que los cubitos de pulpa se separen o se puedan extraer fácilmente con una cuchara.
Cómo aprovechar la pulpa del mango
Para sacar el máximo provecho del mango y evitar el desperdicio de la pulpa aprovechando hasta el último pedazo te damos algunas ideas además de consejos para su correcta conservación.
Los batidos son una excelente manera de utilizar cualquier trozo restante de pulpa como en este batido de mango, ideal para el desayuno o la merienda. Así mismo podrás preparar postres como un granizado de mango o sorbete de mango, agregar esos trozos a una ensalada de salmón ahumado, mango y aguacate o a un tartar de langostinos y mango o incluso si te ha sobrado un poco más de cantidad preparar un chutney de mango o un cremoso helado de mango.
La pulpa, una vez pelada, se conservar de dos maneras diferentes, refrigerándola o congelándola.
- En la nevera: la mejor manera de conservar el mango en la nevera es dentro de un recipiente con cierre hermético. Así podrás disfrutar de la fruta en perfectas condiciones durante 2 o 3 días sin que se vea afectada.
- En el congelador: si te sobra algo de pulpa y no vas a utilizarla en los próximos días, nuestro consejo es que la congeles. Podrás hacerlo congelándola directamente en cubos dentro de bolsas de congelación con cierre hermético, o bien como puré en los moldes de los cubitos de hielo (mejor si son de silicona para que puedas extraer la pulpa fácilmente).