El pimiento choricero es un producto muy importante en nuestra gastronomía gracias a su intenso sabor y su carne, perfecta para todo tipo de recetas, especialmente guisos, arroces o salsas. Cuando nos referimos a la pulpa o carne del pimiento nos referimos a lo mismo. En la mayoría de recetas donde el pimiento choricero es uno de los componentes, únicamente necesitamos la pulpa. Por esa razón saber cómo sacar de la manera más eficiente la pulpa del pimiento choricero es algo que todo cocinero debería dominar. Sigue leyendo y no te pierdas nuestros consejos para sacar la pulpa del pimiento choricero aprovechándolo al máximo para utilizarlo en recetas de arroces, platos de cuchara como el marmitako o la tradicional sopa de marisco y guisos como este sabroso conejo al chilindrón.
Utensilios necesarios para sacar la pulpa del pimiento choricero
Para extraer de forma fácil y rápida la pulpa del pimiento choricero una vez seco necesitarás utensilios básicos que seguro tienes a mano en la cocina.
- Tijeras de cocina: de buen tamaño, afiladas y resistentes que te permitan retirar el tallo y cortar el pimiento.
- Cuchillo pequeño: con el mango corto y la punta afilada para poder retirar las semillas del pimiento.
- Cuchara pequeña: el tamaño ideal es una de postre y que tenga el borde afilado, de manera que puedas raspar la pulpa del interior del pimiento para extraerla fácilmente.
- Recipiente: debe ser un cuenco con una buena base para que no se mueva cuando lo llenes de agua.
Cómo sacar la carne a un pimiento choricero
Sigue nuestros consejos para aprovechar toda la pulpa del pimiento choricero sin llevarte las pepitas y la piel y evitar el desperdicio.
Remojar los pimientos para hidratarlos
Los pimientos choriceros se utilizan secos, por lo que es necesario rehidratarlos primero si se quiere sacar su carne. Llena un cuenco pequeño con agua caliente, coloca dentro los pimientos choriceros y asegúrate de que están totalmente cubiertos de agua. Déjalos reposar durante al menos 30 minutos hasta que estén blandos y bien hidratados, no hacerlo es un error.
Cortar y limpiar los pimientos para quitar las pepitas
Corta el tallo de los pimientos choriceros con la tijera de cocina, y ábrelos a la mitad y a lo largo para retirar las semillas. Para ello utiliza el cuchillo pequeño con cuidado de no retirar nada de pulpa, aunque otro truco rápido es ponerlos directamente bajo un chorro de agua, se llevará la mayoría de pepitas. Si te dejas alguna semilla detrás y se mezcla con la pulpa, dará una textura poco agradable al paladar.
Héctor HernándezRaspar la pulpa con una cucharilla y cuidado
Utiliza la cuchara para raspar el interior de los pimientos cuidadosamente y extraer la pulpa sin llevarte la piel. Es una tarea algo laboriosa pero el resultado bien vale la pena.
Consejos para sacar la pulpa del pimiento choricero
Retirar la pulpa del pimiento choricero es una sencilla tarea que bien hecha te proporcionará una carne ideal para tus recetas. Con estos consejos útiles podrás hacerlo de la manera más eficiente:
- Hidratar adecuadamente los pimientos utilizando siempre agua caliente, nunca agua fría
- Utilizar suficiente agua de manera que cubra por completo los pimientos
- Dejar en remojo los pimientos al menos 30 minutos
- Retirar cuidadosamente las semillas
- Raspar suavemente los pimientos para no llevarte nada de piel. No hagas demasiada presión
Cómo conservar la pulpa del pimiento choricero
Si te sobra pulpa que no vas a utilizar en varios días y no sabes cómo almacenarla, al final se te echará a perder y probablemente tengas que tirarla. Lo mejor será que sepas cómo conservar la pulpa del pimiento choricero para que puedas tenerla a mano cuando la necesites. Podrás hacerlo de dos maneras.
Conservar la pulpa del pimiento choricero en la nevera
Para conservar la pulpa en la nevera y que aguante varios días en buen estado es fundamental el recipiente. Nuestra recomendación es que la conserves en un tarro de cristal pequeño con cierre hermético.
Congelar la pulpa del pimiento choricero
En caso de que prefieras congelarla, la mejor manera de hacerlo es guardando la pulpa en bolsitas pequeñas que cuenten con cierre hermético. Antes de cerrar la bolsa, asegúrate de sacar todo el aire. También sería recomendable etiquetar la bolsita con la fecha y el nombre del alimento.