La cocina mexicana y la Tex-Mex son dos de las cocinas más sabrosas y apreciadas en todo el mundo. Entre las innumerables recetas de cocina mexicana algunas de las más sonadas y replicadas han traspasado fronteras como los tacos, las fajitas, los burritos y las quesadillas, y aunque todas sean relativamente similares, existen diferencias entre ellas. Para averiguarlas, investigamos en la gastronomía mexicana y texana para especificar las distinciones entre estos icónicos platos.
Qué son los tacos
Los tacos son uno de los alimentos más populares preparados a lo largo de todo México. Aunque lo conformen varios ingredientes, los tacos tienen un ingrediente indispensable y diferenciador: la tortilla. Siempre de maíz, la tortilla es la base de todos los tacos, que además llevan un guiso (de carne o de marisco) acompañado con cebolla, cilantro picado y lima. Igualmente, pueden servirse con alguna salsa que puede variar en cuanto al picor según el gusto de los comensales.
Qué son las fajitas
Uno de los platos más populares en la cocina Tex-Mex son las fajitas. Hechas a partir de harina de trigo y ocasionalmente preparadas con harina de maíz, lo curioso de las fajitas es que sus ingredientes siempre se sirven por separado. Es decir, las tortillas de trigo por un lado (en un recipiente adaptado para mantenerlas calientes) y el relleno por otro, de manera que cada comensal pueda servirse la cantidad deseada y montar su propia fajita. Generalmente su relleno está hecho a base de filete de carne, muchas veces falda troceada en cortes pequeños y asados a la parrilla, además de verduras, aunque también es común encontrarlas de otras carnes o pollo.
Qué son los burritos
Ideados para mantener la comida caliente por más tiempo, los burritos no son más que una tortilla cerrada de trigo grande, enrollada y rellena tradicionalmente de guisos de carne, además de arroz, vegetales, y legumbres con especial atención a los frijoles. La clave de los burritos está en las tortillas, denominadas «sobaqueras», un tipo de tortilla de gran tamaño elaborada con trigo, agua, sal y un poco de manteca.
Qué son las quesadillas
Consumidas por todo el país, las quesadillas son un platillo mexicano consistente en una tortilla de maíz o trigo doblada a la mitad y rellena de diversos ingredientes como queso, carnes, pico de gallo, verduras, etc. Lo realmente curioso es que a pesar de su nombre, las quesadillas pueden o no llevar queso entre los diferentes ingredientes que componen el relleno.
Cómo diferenciar tacos, fajitas, burritos y quesadillas
Aunque todos estos platillos sean una auténtica delicia que a veces generan cierta confusión para diferenciarlos, las distinciones elementales entre unas preparaciones y otras son la tortilla usada, el relleno que habitualmente se ofrece, el tamaño y la forma de comerlo.
Masa: maíz o trigo
En el caso de los tacos, la tortilla debe ser de maíz nixtamalizado (cocido con agua y cal), que después de dejarse en reposo se muele y se prepara la masa. Una vez cocinadas, estas tortillas se caracterizan por su textura elástica.
Por su parte las tortillas para las fajitas se preparan con harina de trigo, agua, sal, aceite, y una pizca de levadura. Una vez hecha la masa, se toman porciones en forma de bolitas, se aplanan con un rodillo, y se cocinan en la plancha unos minutos. Al igual que la masa de los tacos, las tortillas te quedarán elásticas y muy ligeras. Al igual que las tortillas clásicas se preparan a base de trigo para elaborar las fajitas, se utiliza harina de trigo para preparar la masa de las tortillas sobaqueras que se emplean para los burritos, con la diferencia de que éstos además llevan manteca en lugar de aceite entre sus ingredientes.
A diferencia de todos los demás platillos, las quesadillas se pueden preparar tanto con tortillas de maíz como de trigo, siendo estas últimas las más comunes. Un elemento fundamental es la cocción de la tortilla, que debe quedar perfectamente cocida, siendo su textura algo más rígida y crujiente que en el caso de los tacos, las fajitas o los burritos.
Ingredientes
Para que hablemos de taco, la clave para distinguirlo además de la tortilla de maíz está en el relleno, ya que siempre debe contener un guiso, además de cebolla, cilantro y lima. Digamos que esa es la base de todos los tacos, a los que generalmente se puede añadir guacamole, pico de gallo o diferentes salsas picantes.
Si el factor distintivo de los tacos es el guiso, la carne asada a la parrilla es el elemento distintivo en las fajitas, que además se suelen servir con más ingredientes cortados en tiras como el pimiento rojo, verde, amarillo, la cebolla… Del mismo modo, se pueden complementar con pico de gallo, crema agria o guacamole.
En cuanto a los burritos, la diversidad de sus ingredientes es un claro diferenciador, ya que además de un guiso de carne, suelen contener arroz blanco, frijoles, e incluso verduras o queso. En cuanto a las salsas, los burritos se pueden servir con salsa de queso, salsa verde, guacamole, salsa de frijoles…
Las quesadillas, al igual que el resto de preparaciones, consisten en una tortilla, esta vez de trigo o maíz, y un relleno que puede variar según el gusto del consumidor, incluyendo o no el queso en la receta. Entre los rellenos más destacados se encuentran el guiso de pollo, el queso, el aguacate y los champiñones. Pueden servirse con guacamole, pico de gallo o crema agria.
Forma final
Si nos referimos al taco, su forma final es la de una tortilla redonda cuyo relleno debe estar centrado y no ser demasiado abundante, de manera que al plegarlo para comerlo, no se desparrame por los lados. La forma de las fajitas también es redonda, pero a diferencia del taco, se sirven por un lado todas las fajitas, y por otra los rellenos de carne y verduras de manera que cada uno se los prepare al gusto.
En cuanto al burrito sí que se diferencia claramente su forma de la de los tacos o las fajitas, ya que el burrito es de forma cilíndrica, y se presenta totalmente cerrado, y cortado en dos mitades del mismo tamaño.
Cuando nos referimos a las quesadillas, su gorma es diferente del resto de preparaciones, ya que a diferencia de todos los demás, las quesadillas tienen forma de media luna y con el relleno en el interior.
Tamaño
Con un diámetro de entre 10 y 15 centímetros, los tacos son más bien de tamaño pequeño, y pueden comerse de un par de bocados. Las fajitas por su parte cuentan con un diámetro de 20 centímetros, siendo así de tamaño mediano.
Con un diámetro de entre 20 y 30 centímetros, las quesadillas son de un tamaño mediano, muy similar al de las tortillas utilizadas para hacer las fajitas. Los burritos se caracterizan por su tamaño, más grande que el de los tacos y el de las fajitas, siendo de entre 40 y 60 centímetros.
Presentación
Los tacos suelen presentarse abiertos con el relleno en el centro, empezando por el guiso, después la cebolla por encima, el cilantro picado, y la lima justo al lado para que cada comensal rocíe la cantidad deseada por encima del taco a su gusto.
Para servir las fajitas en la mesa, se sirven por una parte las tortillas dentro de unas cestitas especialmente diseñadas para ello y un par de recipientes amplios: uno para las carnes y otro para los vegetales.
Los burritos, a diferencia de los tacos y las fajitas, se sirven ya rellenos y envueltos totalmente con la tortilla de trigo formando un cilindro perfectamente cerrado. Generalmente se cortan en dos partes iguales.
Las quesadillas, al igual que los burritos, se sirven con el relleno en el interior, aunque de una manera bien diferenciada. La tortilla se dobla en dos en forma de media luna, y el relleno se reparte de manera uniforme por todo el interior.
