Diferencias entre naranja y mandarina

Una naranja comparada con una mandarina para apreciar la diferencia de tamaño
La naranja y la mandarina son dos cítricos de diferentes orígenes, excelentes opciones de fruta fresca con diferencias nutricionales que nos llevan a preguntarnos, ¿cuál es mejor? ¿Cuál contiene más azúcares? ¿Y vitamina C? Lo vemos a continuación.
Por Laia Shamirian
22 de octubre de 2024

Naranjas y mandarinas nos han salvado de más de un resfriado. Estos dos cítricos ricos en vitamina C se diferencian en tamaño, textura, valores nutricionales y época idónea de consumo. Aprender sus diferencias nos ayuda maximizar sus beneficios y redescubrir la cocina con nuevas propuestas culinarias. A continuación, detallamos los aspectos a tener en cuenta de la naranja, la mandarina y sus principales diferencias.

Qué es la naranja

La naranja (Citrus x sinensis) es un cítrico de cáscara gruesa y rugosa que envuelve entre 10 y 12 gajos. Es uno de los cítricos de mayor tamaño pesando hasta 200 g y tiene un diámetro de unos 7–11 cm. El árbol, el naranjo, alcanza fácilmente los 3-5 metros de altura y puede llegar a vivir 100 años.

Siempre y cuando no sufra heladas, el naranjo da cosechas anuales durante décadas y su fruta naranja es indicativo de que ha alcanzado el punto ideal de maduración, una señal especialmente importante ya que es una fruta no climatérica que no continúa madurando una vez recolectada. Curiosamente en Europa tan sólo conocían la naranja amarga (Citrus x aurantium), hasta que en el año 1500 los portugueses potenciaron sus rutas comerciales con India e iniciaron la exportación de la sedosa y dulce Citrus x sinensis.

La historia de los cítricos está estrechamente relacionada con la continua hibridación, por lo que incluso dentro de la familia del naranjo dulce existen decenas de variedades entre las que destacan la naranja común, la naranja sanguínea, la naranja valencia o la naranja navel.

Actualmente Brasil es el principal productor del mundo seguido por Estados Unidos, China y España. Desde las costas californianas el 61% de las naranjas producidas son del tipo navel, las más consumidas junto con las valencianas en España y Grecia. El paladar italiano en cambio tiene preferencia por la naranja sanguina.

Una naranja abierta por la mitad

Qué es la mandarina

La mandarina (Citrus x reticulata) es un cítrico dulce, de cáscara fina y poco rugosa que envuelve unos gajos bien diferenciados por membranas. Entre las hibridaciones derivadas de Citrus x reticulata la más famosa es Citrus x tangerina.

Las clementinas, clementillas y satsumas se consideran variedades derivadas de la mandarina. La mandarina orri es un híbrido de mandarina diseñado por la Organización de Investigación Agrícola (ARO) de Israel. Esta variedad tiene un aporte superior en azúcares que la hace más dulce. Sus semillas tan sólo pueden ser cultivadas y comercializadas por The Enforcement Organization en España y Portugal. Por su lado otra variedad famosa, la mandarina tango, es resultado de la modificación de la mandarina Nadorcott que dio como resultado una mandarina sin pepitas.

El árbol de la mandarina o mandarino se considera un árbol pequeño o medio que puede crecer de 2 a 5 metros de altura aproximadamente. De preferencia por temperaturas superiores a los veinte grados, el mandarino es capaz de sobrevivir ligeras heladas no inferiores a –2 º C y fácilmente puede vivir 50 años. En 2022 el máximo exportador de mandarinas fue China, seguido por Sudáfrica y Turquía, siendo Rusia el país qué importó la mayor cantidad.

Una mandarina abierta por la mitad

En qué se diferencian naranja y mandarina

Las naranjas y mandarinas se diferencian en tamaño, dulzor, distribución por el mundo y en usos culinarios. Ambas, como buenos cítricos, cuentan con cientos de variedades, lo que influye en el momento de recolecta y la cantidad de tipos distintos que hay en los mercados.

Origen y estacionalidad de naranjas y mandarinas

Naranjas y mandarinas forman parte del género botánico citrus característico por su alto nivel de hibridación. Debido a la amplia gama de tipos de naranja y mandarinas se pueden consumir prácticamente todo el año. Sin embargo y por poner algunos ejemplos que as diferencian, las naranjas navel están disponibles entre octubre y marzo, las naranjas valencia destacan en el período invernal y las naranjas Late están disponibles durante toda la primavera. La mandarina (Citrus reticulata) se recolecta entre mayo y junio, aunque entre sus hibridaciones está Fortuna, un cruce entre mandarina y clementina, que también está disponible en invierno y primavera o Ortanique, una variedad primaveral.

Textura, forma y presentación

La naranja es más grande, pesada y rugosa que la mandarina. Aunque ambas son hesperidios, los gajos de la naranja son mucho más gruesos y están separados por una membrana más fina que los de la mandarina, que se separan con facilidad convirtiéndose en una de las frutas predilectas para meriendas espontáneas. Las últimas variedades diseñadas como la mandarina tango, además, no presentan semillas.

Varias naranjas y mandarinas listas para comer

Valores nutricionales y propiedades

La naranja y la mandarina son parecidas en aporte calórico y en azúcares. Ambas aportan aproximadamente 50 kcal por cada 100 g de parte comestible y unos 10 g de azúcares. En cambio, la principal diferencia en este sentido entre mandarina y naranja es el aporte de vitamina C. La naranja contiene 52,3 mg de vitamina C, lo que representa entre un 60 y un 70% de la Cantidad Diaria Recomendada (CDR). La mandarina contiene 26,7 mg, que continúa siendo un aporte muy notorio, aunque queda en torno al 30% del CDR.

Por esta razón, entre los beneficios y propiedades de la naranja destaca que contiene más vitamina C que la mandarina y da un mayor refuerzo al sistema inmunológico. Entre los beneficios y propiedades de la mandarina cobra un valor relevante su aporte en flavonoides y antioxidantes relacionados con efectos antiinflamatorios y antienvejecimiento. Tanto las naranjas como las mandarinas son frutas aliadas para la pérdida de peso por su aporte en fibra, agua y vitaminas.

De esta manera no podemos decir que la naranja o la mandarina sea mejor la una que la otra, sino que en una dieta equilibrada son complementarias.

Sabor y usos culinarios

Las recetas con naranja se mueven entra la dulzura del desayuno en forma de fruta fresca, zumo o mermelada, el efecto sedante del agua de azahar y el matiz acidulado que acompaña al pollo, al pato y al lenguado a la naranja. En coctelería el zumo de naranja es especialmente apreciado para elaborar mimosa y la genuina agua de Valencia.

Las recetas con mandarina en cambio son menos abundantes y siguen la uniformidad de la merienda y el tentempié saludable, aunque también son ideales para opciones algo más festivas como la mermelada de mandarina, el bizcocho o la tarta de frutas. Para horario adulto, es especialmente interesante contemplarla en combinaciones con vodka.