Existe una convención internacional no oficial que siguiendo distintos parámetros de seguridad y conservación de los alimentos los clasifica en seis gamas diferentes. Queremos contarte todo lo necesario acerca de la llamada cuarta gama, un tipo de alimentos que podemos encontrar de forma habitual en nuestros supermercados.
Qué son los alimentos de cuarta gama
Los alimentos de cuarta gama son un tipo de alimento "envasado al vacío" o "en atmósfera controlada", dos expresiones que ayudan a entender con cierta facilidad su naturaleza. Eso sí, siempre y cuando dichos alimentos no hayan sido sometidos a ningún tratamiento térmico, es decir, que estén crudos. Por tanto, otras de las características de esta gama es que tienen una fecha de caducidad relativamente corta y es imprescindible conservarlos en condiciones de refrigeración.
En los productos "al vacío" se elimina el aire y con este el oxígeno causante de los procesos de oxidación que aceleran el deterioro alimentario. En aquellos en los que se indica "en atmósfera controlada", el aire se sustituye por un gas o mezcla de gases que ayuda a controlar estos procesos de deterioro con mayor eficacia.
Por último, en relación a sus características, es frecuente que los alimentos de la IV gama hayan sido sometidos a procesos higienizantes antes de su envasado al vacío o en atmósfera controlada. Estos procesos consisten, con frecuencia, en el uso de ciertas soluciones acuosas de hipoclorito sódico, peróxido de hidrógeno, ozono y similares.
Ejemplos de alimentos de cuarta gama
La mayor parte de la oferta de cuarta gama son alimentos de origen vegetal y no es frecuente encontrar alimentos de origen animal en ella. Uno de los productos estrella de esta gama son las bolsas de ensaladas listas para servir, sin la necesidad de lavarlas previamente. Las patatas, zanahorias, los pimientos verdes y rojos, y una amplia variedad de frutas y verduras (normalmente troceados y siempre crudos) forman parte de la amplia oferta que a día de hoy disponen los consumidores y la hostelería de productos de IV gama.
Ventajas y desventajas de los alimentos de cuarta gama
La mayor ventaja consiste en disponer de productos vegetales frescos, listos para su consumo y sin la necesidad de tenerlos que lavar antes de su consumo.
Su principal desventaja parte de su procesado previo, que provoca que sean productos bastante perecederos y que necesiten de refrigeración para su conservación. Al ser productos que en la mayor parte de los casos están troceados o cortados, el corte de estos tejidos vegetales hace aumentar la respiración celular del vegetal, una circunstancia que acelera su deterioro (que sería aún más rápido si las condiciones no fueran de vacío o con atmósfera controlada). Al mismo tiempo, al tratarse de productos crudos, no estériles, es posible que los cortes faciliten el crecimiento de microorganismos (hongos o bacterias).
Por el proceso que implica su comercialización, los productos de la cuarta gama son más caros que los de la primera gama y, en base a su relativa fragilidad, requieren de una logística especializada para garantizar su rotación.