Este dulce crocante y goloso está hecho de almendras crudas cubiertas de caramelo. Esta es una de esas recetas de la abuela tan tradicionales que, año tras año, siguen haciendo disfrutar a los paladares más golosos. Son especialmente conocidas las de Alcalá de Henares, que datan del siglo XVIII.
Las almendras garrapiñadas son también muy populares en ferias locales, donde se venden en puestos que elaboran in situ no solo almendras garrapiñadas, sino también semillas como las pipas de girasol y otros frutos secos como las avellanas o los pistachos.
Seguro que alguna vez te has acercado a alguno de estos puestos de feria, atraído por el olor a caramelo mezclado con los frutos secos y te has dejado tentar por alguno de sus dulces. Ahora, con esta receta, también podrás hacerlas en casa.
Para elaborar almendras garrapiñadas en casa usaremos solo 3 ingredientes: almendras crudas, azúcar y agua. Aunque también podéis añadir esencia de vainilla o un poco de canela en polvo (si os decidís por añadir cualquiera de estos dos ingredientes hacedlo a la hora de añadir el agua).
Esta es una receta relativamente fácil, pero hay que prestar especial atención en primer lugar al caramelo para que no se queme, ya que puede resultar amargo. En segundo lugar, hay que vigilar las almendras para que estén cubiertas en todo momento con el caramelo y que no se quemen. Con estos consejos, el éxito está asegurado.
Información de la receta
- Tiempo de preparación: 10 minutos
- Tiempo de cocinado: 30 minutos
- Tiempo total: 40 minutos
- Raciones: 8, 350 g
- Categoría: postres
- Tipo de cocina: española
- Calorías por ración (kcal): 217
Ingredientes de las almendras garrapiñadas
- 200 g de almendras crudas
- 150 g de azúcar
- 100 ml de agua
Cómo hacer almendras garrapiñadas
Comenzamos poniendo en una sartén honda 200 g de almendras crudas y 150 g de azúcar.
Vertemos en la sartén 100 ml de agua para formar un jarabe. En este punto, podemos añadir esencia de vainilla o canela en polvo si nos gustan las almendras garrapiñadas con más sabor.
Calentamos a fuego suave la sartén hasta que el azúcar se disuelva y comience a formarse un jarabe ligero, y comiencen a verse burbujitas. Esto llevará unos 10 minutos. Durante este tiempo, no hace falta que removamos las almendras.
A partir de este punto, el almíbar seguirá reduciéndose así que debemos tener más cuidado para que todas las almendras queden impregnadas por igual, por lo que usaremos una cuchara de madera para remover constantemente la mezcla hasta que el azúcar cristalice.
Subimos un poco el fuego y no dejaremos de remover las almendras hasta que el azúcar cristalizado se convierta en caramelo líquido y adquiera un tono dorado. En este punto, retiramos la sartén del fuego.
Volcamos las almendras cubiertas con el caramelo sobre una lámina de papel de horno y nos ayudamos de un tenedor para separar unas almendras de otras.
Una vez frías, ya las podremos consumir. Podemos conservar las almendras garrapiñadas en un tarro de cristal cerrado herméticamente durante varios días.
Resumen fácil de preparación
- Ponemos en una sartén las almendras y el azúcar
- Vertemos el agua
- Calentamos hasta que se forme un jarabe ligero
- Removemos hasta que el azúcar cristalice
- Seguimos removiendo hasta formar el caramelo
- Volcamos las almendras cubiertas con caramelo sobre papel de horno y las separamos con un tenedor
- Conservamos las almendras garrapiñadas en un tarro de cristal
