Lo que diferencia el arroz con leche asturiano de otras recetas de arroz con leche que podemos encontrar es su preparación que, aunque sencilla, requiere de paciencia y cuidado para lograr el punto exacto de cremosidad que lo convierte en un bocado irresistible. Además, la costra superior de azúcar caramelizada que lo cubre hace de este postre un auténtico manjar.
Su cremosidad excepcional se logra gracias a la cocción lenta del arroz en leche, que permite que los granos de arroz liberen todo su almidón espesando la mezcla de manera natural. Otra de sus particularidades es que una vez servido, se espolvorea con azúcar y se carameliza con un soplete, creando una fina capa crujiente que contrasta con la cremosidad del interior. Podemos servirlo templado o frío, según el gusto del consumidor. También podemos añadir un pequeño chorrito de anís antes de servir.
En Asturias, el arroz con leche se ha convertido en un símbolo de la cocina regional y es un postre que no falta en sus celebraciones y fiestas. Su preparación tradicional es considerada un arte y cada hogar asturiano tiene su propia receta que se transmite de generación en generación.
Información de la receta
- Tiempo de preparación: 20 minutos
- Tiempo de cocinado: 1 h y 45 minutos
- Tiempo total: 2 horas y 5 minutos (más tiempo de enfriado)
- Raciones: 8
- Categoría: postres
- Tipo de cocina: asturiana
- Calorías por ración (kcal): 370
Ingredientes del arroz con leche asturiano
- 200 g de arroz redondo
- 100 g de agua
- Piel de medio limón
- 1 rama de canela
- 1,5 litros de leche entera
- 180 g de azúcar
- 60 g de mantequilla sin sal
- 40 g de azúcar (para caramelizar)
Cómo hacer arroz con leche asturiano
Comenzaremos poniendo en un cazo grande 200 gramos de arroz redondo junto con 100 gramos de agua. Llevamos a fuego medio sin dejar de remover, hasta que el agua se evapore por completo, de esta manera se abrirá el grano de arroz y soltará todo el almidón.
Retiramos el cazo del fuego y añadimos la piel de medio limón y 1 rama de canela. Iremos añadiendo poco a poco 1,5 litros de leche entera. No añadiremos más leche hasta que se haya absorbido la anterior y se haya integrado por completo.
Dejamos el fuego bajo y no dejaremos de remover para que no se pegue al fondo. Iremos añadiendo la leche a pequeñas porciones hasta terminar con toda, este proceso puede tardar 1 hora y media.
Cuando tengamos una textura de crema, dejamos de añadir leche y retiramos el cazo del fuego.
Retiramos el limón y la canela y añadimos 180 gramos de azúcar blanco. Mezclamos bien.
Agregamos 60 gramos de mantequilla sin sal y volvemos a llevar a fuego bajo durante 5 minutos para que se integre todo por completo.
Ponemos la mezcla en los cuencos y repartimos 40 gramos de azúcar en la superficie de todos los cuencos.
Tostamos el azúcar con un soplete de cocina. Si no tenéis soplete para caramelizar el azúcar, se puede lograr un resultado muy parecido metiendo los cuencos en la parte alta del horno durante unos minutos con la función gratinar.
Repetimos para caramelizar el azúcar de todos los cuencos y servimos.
Resumen fácil de preparación
- Ponemos el arroz y el agua en un cazo, llevamos a fuego medio sin dejar de remover hasta que se evapore el agua por completo
- Añadimos la piel del limón y la canela, añadimos la leche poco a poco sin añadir más hasta que no se haya integrado la anterior
- Seguimos añadiendo leche poco a poco, a fuego bajo y sin dejar de remover para que no se pegue al fondo
- Cuando tengamos una textura cremosa retiramos del fuego
- Retiramos el limón y la canela y añadimos el azúcar
- Agregamos la mantequilla y y cocinamos 5 minutos más
- Ponemos el arroz con leche en los cuencos y repartimos el azúcar
- Tostamos el azúcar hasta que se caramelice
- Servimos
