El boniato es un tubérculo de la misma familia que las patatas. Desde siempre ha estado disponible en las verdulerías, pero no ha sido hasta hace unos pocos años que ha ido adquiriendo una gran popularidad dado que, desde un punto de vista nutritivo, es mucho más interesante que la patata, aunque pueda sorprendernos ese dato ya que tiene un sabor más dulce. Desde el punto de vista culinario, se trata de un producto muy versátil en la cocina que se puede preparar de muchas maneras: al horno, en puré, o como en el caso que nos ocupa, frito. ¡Ah! ¡Y hay quien hace hasta postres!
Pero volvamos a la receta que queremos contarte aquí. Para preparar este boniato frito lo vamos a hacer como las patatas fritas. ¿Exactamente igual? En este caso sí. Al ser de la misma familia basta con sustituir uno por otro. Sigue leyendo que te lo contamos con todo detalle.
Información de la receta
- Tiempo de preparación: 10 minutos
- Tiempo de cocción: 15 minutos
- Tiempo total: 55 minutos
- Raciones: 4
- Categoría: aperitivo
- Tipo de cocina: internacional
- Calorías: 530 kcal por cada 100 g
Ingredientes del boniato frito para 4 personas
- 500 g de boniato
- Aceite de girasol para freír
- Sal
- Otras especias al gusto como pimentón, ajo en polvo, orégano… (opcional)
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Pelar los boniatos. Cortarlos en rodajas finas de 1 mm de espesor. Dependiendo de cómo se te de, las rodajas se pueden hacer a cuchillo. No obstante, te recomendamos que hagas como hemos hecho, usando una buena mandolina. Pero presta atención cuando la uses ya que es muy fácil cortarse con ella. Si el boniato fuera muy grueso, lo puedes trocear a lo largo.
Lavar muy bien el boniato para quitarle el almidón. Se enjuaga un par de veces con agua, cambiando el agua cada vez y, por último, se deja reposar unos 20 minutos.
Pasado el tiempo de remojo, escurrir con cuidado el boniato y secarlo muy bien con un paño de cocina limpio. Dejarlo reposar unos minutos al aire para que se termine de secar.
Poner a calentar abundante aceite para freír en una sartén o en una freidora a 180 ºC. Es decir, el aceite debe estar bien caliente pero sin que llegue a humear. Cuando esté a temperatura, se añaden las rodajas una a una y se fríen unos minutos, hasta que casi deje de burbujear. Procura no freír demasiadas rodajas a la vez para que el aceite no pierda temperatura, de lo contrario te quedará muy grasiento.
Cuando el burbujeo haya bajado, se sacan de la sartén y se dejan reposar sobre papel absorbente para que pierdan el exceso de aceite. Se vuelve a realizar el paso anterior hasta haber frito todo el boniato.
Antes de servir, sazonamos con sal y, si se desea, podemos ponerle otras especias de nuestra elección.
Resumen fácil de preparación
- Pelar los boniatos y cortarlos en rodajas de 1 mm de espesor
- Lavar 2 veces el boniato y dejarlos en remojo 20 minutos
- Escurrir y secar las rodajas con un paño de cocina. Dejar secar al aire unos minutos
- Freír por tandas las rodajas de boniato en aceite bien caliente a fuego medio, hasta que empiecen a flotar y el burbujeo sea más suave
- Escurrir y dejar reposar sobre papel absorbente. Repetir hasta freír todo
- Sazonar con sal antes de servir. Si se desea se puede especiar al gusto
