La crema de apio es una receta ideal para servir como primer plato ya sea como parte de un menú de diario o en una ocasión especial ya que resulta especialmente sabrosa y fácil de hacer; solo tenemos que sofreír las verduras y luego dejarlas cocer con el caldo de verduras antes de triturar el conjunto. Podemos darle un toque muy aromático incluyendo tomillo fresco en la cocción, aunque cualquier otra hierba aromática que os guste o tengáis disponible le irá de fábula también.
La combinación de ingredientes que proponemos en esta receta da como resultado una crema muy equilibrada y sabrosa, aunque como siempre, se puede personalizar o ajustar según preferencias. Por ejemplo, podemos sustituir la chalota o cebolla por un puerro o también podemos sustituir la patata por manzana para conseguir una crema con un matiz de sabor diferente y muy original.
En esta ocasión, hemos añadido patatas a la crema para conseguir un resultado más espeso, aunque se podrían omitir si lo que buscamos es una crema más líquida. A nosotros nos gusta acompañarla de elementos crujientes que aportan un contraste de texturas muy agradable como unos clásicos picatostes o bien, como en esta ocasión, con unos garbanzos crujientes, unos trocitos de apio o unos dados de bacon salteados en la sartén.
Información de la receta
- Tiempo de preparación: 10 minutos
- Tiempo de cocinado: 30 minutos
- Tiempo total: 40 minutos
- Raciones: 2
- Categoría: entrantes
- Tipo de cocina: internacional
- Calorías por ración (kcal): 239
Ingredientes de la crema de apio
- 60 g de chalota o cebolla
- 250 g de patatas
- 4 ramas de apio (200 g)
- 20 g de mantequilla
- 400 ml de caldo de verduras
- 2 ramitas de tomillo fresco
- Sal
- Pimienta negra molida
Cómo hacer crema de apio
Pelamos y cortamos 60 g de chalota o cebolla a trozos, pelamos 250 g de patata y la cortamos en dados y cortamos a rodajas 4 ramas de apio.
Calentamos 20 g de mantequilla en una olla y sofreímos la chalota, la patata y el apio durante 8 minutos a fuego bajo, removiendo.
Vertemos 400 ml de caldo de verduras y 2 ramitas de tomillo fresco. Si no tenemos un caldo de verduras a mano, podemos sustituir este por agua, aunque el resultado será algo menos sabroso.
Removemos y cocinamos el conjunto a fuego medio durante unos 20 minutos, hasta que las patatas estén tiernas.
Retiramos las ramas de tomillo y trituramos las verduras con la batidora de mano hasta conseguir que quede una crema homogénea.
Salpimentamos la crema de apio y la servimos inmediatamente decorada al gusto, en nuestro caso, con unos garbanzos crujientes, unas ramitas de apio y unas hierbas aromáticas al gusto.
Resumen fácil de preparación
- Troceamos la chalota, la patata y el apio
- Sofreímos estos ingredientes
- Añadimos el caldo y el tomillo
- Dejamos cocer el conjunto hasta que las patatas estén tiernas
- Trituramos
- Servimos la crema de apio decorada al gusto
