Como muchas otras recetas, la farinata genovesa surgió a base de productos que se cultivaban en la zona, los garbanzos y el aceite, que son precisamente los ingredientes básicos de esta elaboración.
La fainá se ha ido extendiendo desde Génova a otras regiones de Italia e incluso a otros países, y si bien en Italia aún hay zonas donde se toma sola, a día de hoy en sitios como Argentina es habitual que se sirva para acompañar a la pizza, con queso provolone o con mozzarella.
De cualquiera de las maneras, es una delicia y a continuación te contamos cómo preparar esta torta de harina de garbanzos para que nos quede con la textura y el grosor adecuados, que para ser la tradicional debe ser bien fina.
Información de la receta
- Tiempo de preparación: 10 minutos
- Tiempo de cocinado: 40 minutos
- Tiempo total: 50 minutos (más el tiempo de reposo de la masa)
- Raciones: 6
- Categoría: entrante
- Tipo de cocina: italiana
- Calorías por ración (kcal): 168
Ingredientes de la farinata o fainá
- 700 ml de agua fría
- 150 g de harina de garbanzos
- 50 ml de aceite de oliva
- 1 cucharadita de sal
- Pimienta negra molida
Cómo hacer farinata o fainá
En un bol, ponemos 700 ml agua y sin dejar de remover vamos añadiendo 150 g de harina de garbanzos.
Una vez mezclados, echamos 50 ml de aceite de oliva, 1 cucharadita de sal y seguimos removiendo. Cuando veamos que la masa está bien integrada, la tapamos y la dejamos reposar, en la nevera, un mínimo de 3 horas, e incluso más, pudiendo estar hasta 8 horas. De esta manera, la harina se irá hidratando y la textura de la masa final será mucho más fina.
Pasado el tiempo de reposo, encendemos el horno y marcamos 230 °C, con calor arriba y abajo, para que se vaya calentando. Una vez el horno ha alcanzado la temperatura indicada, engrasamos una fuente de horno o sartén y echamos la masa, que nos tiene que quedar fina. Para esta cantidad de masa he usado una bandeja de horno de 28 cm de diámetro.
Horneamos la fainá hasta que esté dorada y crujiente, unos 40 minutos, que podrá variar en función de cada horno. Una vez lista, la retiramos del horno y le añadimos pimienta negra molida por encima.
La desmoldamos y la servimos caliente y cortada en triángulos.
Resumen fácil de preparación
- Mezclamos el agua con la harina de garbanzos
- Añadimos el aceite y la sal, y dejamos reposar en frío entre 3 y 8 horas
- Precalentamos el horno a 230 °C y echamos la mezcla en un molde
- Horneamos unos 40 minutos, la retiramos y le ponemos pimienta negra molida
- La desmoldamos y la servimos cortada en triángulos
