Una buena ración de frijoles, perfectamente cocinados y sazonados, son omnipresentes en casi todas las mesas de gran parte de Latinoamérica donde, sin duda, es la legumbre por excelencia. Frijoles, fríjoles, fréjoles, porotos, alubias... son varios de los nombres regionales con los que se conoce a esta legumbre de la que existen numerosas variedades. Si bien es cierto, al otro lado del charco, las alubias blancas parecen tener un consumo residual, pues en cada país se prefiere el uso de sus variedades más autóctonas.
En este artículo te queremos contar la manera más básica de cocinar los frijoles. Para ello, hemos elegido lo que en México se conoce como frijoles de la olla. Se trata de una de las guarniciones más extendidas, tanto que no es raro encontrarse que en las casas se prepare una gran cantidad para tener de sobra durante varios días.
Los frijoles cocinados simplemente con cebolla y ajo, a fuego lento durante un buen rato, no solo nos sirven como acompañamiento sino que también son la base sobre la cual elaborar otros platos como los frijoles refritos (rehogados con un sofrito de cebolla y aplastados para hacer un puré) o los frijoles charros (cuando se les añade carne).
Verás que la elaboración de los frijoles según esta receta no tiene ningún misterio, pero presta atención a las diferentes etapas, pues te contamos la forma correcta de cocerlos para que no revienten y que tampoco queden duros. ¡Vamos a por ellos!
Información de la receta
- Tiempo de preparación: 5 minutos
- Tiempo de cocinado: 2 horas
- Tiempo total: 2 horas y 5 minutos (más el tiempo de remojo)
- Raciones: 4
- Categoría: guarnición
- Tipo de cocina: mexicana
- Calorías por ración (kcal): 351
Ingredientes de los frijoles para 4 personas
- 400 g de frijoles de la variedad deseada (pintos, bayos, negros…)
- 1 cebolla
- 2 dientes de ajo
- 1 o 2 hojas de laurel (opcional)
- 1 cucharada de aceite de oliva
- Sal
- Pimienta negra molida
Cómo hacer frijoles
Al igual que para la gran mayoría de legumbres, para preparar los frijoles necesitamos ponerlos en remojo previamente para que se ablanden y se reduzca considerablemente su tiempo de cocción. Para ello, vamos a tomar 400 g de frijoles, peso en seco, de la variedad que hayamos elegido, los ponemos en un bol y los cubrimos con abundante agua. Los dejamos de 8 a 12 horas a temperatura ambiente o 24 horas en la nevera. ¡Ojo! No hay que excederse con el tiempo de remojo pues corremos el riesgo de que empiecen a fermentar y, en ese caso, el sabor de la preparación final se vuelve menos agradable.
Damián SerranoUna vez remojados, ponemos abundante agua a cocer en una olla y, cuando esté bien caliente pero sin que llegue a hervir, añadimos los frijoles escurridos junto a 1 cebolla pelada y partida por la mitad, 2 de dientes de ajo pelados y ligeramente machacados y, de manera opcional, 1 o 2 hojas de laurel y 1 cucharada de aceite de oliva. La sal la dejamos para el final ya que si la ponemos al principio aumentará el tiempo de cocción.
Dejamos cocer los frijoles a fuego bastante bajo en olla medio tapada, hasta que estén tiernos, lo que nos puede llevar de 1 hora y media hasta dos horas. En los 10 últimos minutos de cocción, sazonamos al gusto con sal y pimienta. Durante la cocción, hay que procurar que los frijoles estén en todo momento bien cubiertos de agua con al menos un par de dedos por encima. Si fuera necesario, durante la cocción completamos con agua hirviendo para que no se nos sequen. Deben cocerse a fuego bajito, evitando borbotones y con suficiente agua, estos tres puntos son la clave para que no se rompan demasiado al cocer. Además, procuraremos no moverlos para ayudar también a que se mantengan enteros. Pasado el tiempo de cocción, ya tendríamos listos nuestros frijoles para utilizar a conveniencia.
Resumen fácil de preparación
- Dejar a remojo los frijoles la noche anterior
- Añadir los frijoles a la olla con agua caliente, la cebolla, los ajos, el laurel y el aceite
- Cocer de 1 hora y 30 minutos a 2 horas. Completar con agua hirviendo en caso necesario. Salpimentar y cocer 10 minutos más