El secreto para preparar unos mejillones en salsa marinera exquisitos está en conseguir unos mejillones bien frescos, sabrosos y carnosos y en no cocerlos en exceso. Además, es crucial picar la cebolla en trozos muy pequeños y pocharla lentamente permitiendo que los sabores de la salsa se integran y se mezclen.
La salsa marinera se puede preparar de muchas maneras que, aunque parecidas, cada una tiene el toque especial de la casa en la que se prepara. Quizás, una de las principales diferencias es hacerla con o sin tomate. En esta ocasión, hemos optado por la versión básica de la salsa marinera sin tomate aunque si quisiéramos añadirlo, solamente tendríamos que incorporar un par de cucharadas de salsa de tomate al sofrito de cebolla cuando esta ya esté bien pochada.
Para espesar la salsa, lo habitual es usar una cucharada de harina de trigo. A nosotros, sin embargo, nos gusta usar pan rallado ya que de esta manera, conseguimos de forma fácil y rápida la textura que nos gusta.
El toque picante es otro de los aspectos que se suele adaptar a los gustos de cada casa. En esta ocasión, hemos optado por añadir un poco de pimentón picante para conseguir ese punto que tanto nos gusta, aunque se podría prescindir complemente de él en caso de que a los comensales no les guste el picante.
Con estas pautas y consejos, ya podemos ponernos con la elaboración de este clásico de la cocina gallega que os encantará.
Información de la receta
- Tiempo de preparación: 15 minutos
- Tiempo de cocinado: 30 minutos
- Tiempo total: 45 minutos
- Raciones: 4
- Categoría: entrante
- Tipo de cocina: gallega
- Calorías por ración (kcal): 230
Ingredientes de los mejillones a la marinera
- 1 kilo de mejillones
- 1 hoja de laurel
- 1 cebolla
- 1 diente de ajo
- 1 manojo de perejil
- 30 ml de aceite de oliva
- 1 cucharadita de pimentón dulce
- ½ cucharadita de pimentón picante (opcional)
- 125 ml de vino blanco
- 250 ml del caldo de los mejillones
- 20 g de pan rallado
Cómo hacer mejillones a la marinera
Comenzamos lavando y limpiando 1 kg de mejillones con agua fría. Les quitamos las barbas y desechamos los que estén rotos o abiertos. Colocamos los mejillones limpios en una cazuela de base amplia junto con 1 hoja de laurel y un poco de agua. Tapamos la olla, la ponemos a fuego medio-alto y esperamos a que los mejillones se abran con el vapor.
En cuanto estén abiertos, los retiramos del fuego para evitar que se cocinen en exceso y los reservamos. Debemos evitar levantar la tapa para comprobar si ya están abiertos ya que se escaparía el vapor. Si disponemos de una, lo mejor es optar por una cazuela con tapa de vidrio y si no es el caso, con estar atentos al sonido de las conchas de los mejillones al abrirse, tendremos suficiente.
Colamos 250 ml del agua de cocción de los mejillones que ha quedado en la olla y la reservamos para añadirla a la salsa.
Para preparar la salsa marinera, cortamos 1 cebolla en trozos muy pequeños. Picamos también 1 diente de ajo, lavamos y cortamos 1 manojo de perejil y reservamos estos ingredientes.
En una cazuela amplia, calentamos 30 ml de aceite de oliva suave, añadimos el ajo y la cebolla picados y un poco de perejil. Dejamos pochar estos vegetales a fuego lento durante unos 20 minutos hasta que la cebolla esté transparente.
Cuando la cebolla esté transparente, añadimos 1 cucharadita de pimentón dulce y, de manera opcional, media cucharadita de pimentón picante. Añadimos 125 ml de vino blanco, mezclamos el conjunto y lo dejamos cocinar unos 5 minutos hasta que se evapore parte del líquido.
Agregamos 250 ml del caldo de cocción de los mejillones que habíamos reservado.
Echamos 20 g de pan rallado, removemos la salsa para integrar bien todos los ingredientes y la dejamos cocinar unos minutos.
Cuando la salsa esté bien ligada, retiramos una de las conchas de cada mejillón y los vamos incorporando a la cazuela con la salsa de manera que se impregnen bien con esta.
Para terminar, espolvoreamos los mejillones con un poco de perejil picado y los servimos bien calientes.
Resumen fácil de preparación
- Limpiamos y abrimos los mejillones al vapor
- Los retiramos del fuego en cuanto estén abiertos
- Colamos el caldo de cocción y lo reservamos
- Picamos la cebolla, el ajo y el perejil
- Pochamos la cebolla con el ajo y parte del perejil
- Añadimos el pimentón y el vino blanco, y dejamos reducir
- Agregamos un vaso de caldo reservado
- Espesamos la salsa con pan rallado
- Incorporamos los mejillones con una concha
- Servimos
