Esta mezcla de cereales, frutos y semillas es un producto originario de Suiza muy habitual en los desayunos. Hacer muesli casero es muy sencillo y tiene muchas ventajas con respecto a otras mezclas de cereales comerciales: nuestro muesli es saludable, ya que lo prepararemos sin azúcar, no necesita horno ni ningún otro proceso de cocinado y además, tiene la gran ventaja de que podemos ponerle los ingredientes que más nos gusten o que tengamos en la despensa, con la garantía de que conocemos su procedencia.
Esta mezcla de cereales y frutos secos se elabora simplemente mezclando sus ingredientes y, al contrario que la granola, no lleva líquidos para edulcorar o amalgamar, y tampoco se tuesta. Una vez preparada la mezcla, se guarda en un bote y estaría listo para su uso.
Para degustar el muesli en el desayuno, en su formato habitual y tradicional, podemos prepararlo dejándolo reposar en un líquido toda la noche en la nevera, bien sea leche o yogur. Con este preparado también podemos enriquecer otras elaboraciones como panes o galletas, lo cual nos encanta.
A continuación, te contamos cómo preparar muesli casero, aunque esta receta es personalizable al gusto y se pueden utilizar otros cereales u otros frutos secos a la elección de cada uno. El resultado será igualmente delicioso.
Información de la receta
- Tiempo de preparación: 10 minutos
- Tiempo total: 10 minutos
- Raciones: 10, 500 g
- Categoría: desayuno
- Tipo de cocina: suiza
- Calorías por ración (kcal): 185
Ingredientes del muesli casero
- 50 g de avellanas o almendras crudas
- 50 g de anacardos crudos
- 5 nueces
- 5 orejones
- 150 g de copos de avena
- 50 g de copos de maíz
- 50 g de salvado de trigo
- 50 g de arándanos deshidratados
- 20 g semillas de sésamo
- 20 g pipas de calabaza
- 1 cucharada de canela en polvo
- 1 pizca de sal
Cómo hacer muesli casero
Una vez tenemos pesados todos los ingredientes que emplearemos para hacer el muesli casero, troceamos los frutos secos; cortamos 50 g de avellanas crudas, 50 g de anacardos crudos y pelamos y troceamos 5 nueces. Una vez tenemos troceados los frutos secos en trozos más o menos uniformes y no demasiado pequeños, los reservamos. Troceamos también 5 orejones y los reservamos.
En un bol amplio, que luego nos permita mezclar bien todos los ingredientes, echamos 150 g de copos de avena, 50 g de copos de maíz y 50 g de salvado de trigo.
A continuación, añadimos las frutas deshidratadas: 50 g de arándanos y los orejones que habíamos troceado antes.
Incorporamos a la mezcla los frutos secos ya troceados y reservados.
Añadimos 20 g de semillas de sésamo y 20 g de pipas de calabaza peladas.
Finalmente, y cuando ya tenemos todos los ingredientes en el bol, añadimos 1 cucharada de canela en polvo y 1 pizca de sal, que ayudará a potenciar mucho los sabores. Podemos añadir cualquier otra especia que nos guste, pero en este caso queremos algo básico y sencillo.
Una vez tenemos todos los ingredientes en el bol, los mezclamos bien
Y ya lo tendríamos listo nuestro muesli casero para guardar y utilizar en las preparaciones que más nos gusten, como en los desayunos, meriendas, para enriquecer yogures o para emplear en galletas o panes.
Resumen fácil de preparación
- Pesamos los ingredientes, troceamos los frutos secos y los orejones, y los reservamos
- En un bol amplio ponemos los copos de avena y maíz, y el salvado
- Añadimos los arándanos y los orejones troceados
- Añadimos los frutos secos troceados
- Incorporamos las semillas de sésamo y las pipas
- Finalmente, añadimos la sal y la canela
- Mezclamos bien todo con una cuchara
- Guardamos el muesli casero en un recipiente hermético para conservar
