Dos capas deliciosas y reconfortantes forman este pastel salado. Una primera capa con una salsa de carne picada, muy parecida a la salsa boloñesa solo que más espesa y hecha con pollo. Para hacer esta capa usaremos carne picada de pollo, un buen sofrito, salsa de tomate y hierbas para aromatizar con las que además conseguiremos que este pastel sea aún más atractivo al paladar.
La segunda capa del pastel está formada por un puré de patatas suave y meloso, que no hace más que ensalzar el sabor de la salsa de carne.
Para terminar, y que quede bien doradito, pondremos encima de la capa de puré de patata un queso fundente rallado, que puede ser cualquiera que tengáis por vuestras neveras: mozzarella, cheddar o incluso un queso manchego semicurado. De ahí al horno con la función para gratinar, y quedaría listo.
Preparad mantel y cubiertos e id llamando a todos a la mesa. Con este pastel, no habrá ningún tipo de queja y con él triunfaréis sin duda.
Información de la receta
- Tiempo de preparación: 15 minutos
- Tiempo de cocinado: 45 minutos
- Tiempo total: 55 minutos
- Raciones: 4
- Categoría: plato principal
- Tipo de cocina: internacional
- Calorías por ración (kcal): 647
Ingredientes del pastel gratinado de patata y carne picada de pollo
- 750 g de patatas
- Sal
- Pimienta negra recién molida
- 1 pizca de nuez moscada
- 40 g de mantequilla
- 2 cucharadas de leche
- 2 dientes de ajo
- 1 cebolla
- 1 zanahoria
- 30 ml de aceite de oliva
- 600 g de carne picada de pollo
- 1 cucharadita de orégano
- 100 ml de vino blanco
- 400 g de tomate triturado
- 75 g de queso mozzarella rallado
Cómo hacer pastel gratinado de patata y carne picada de pollo
Para comenzar, lavamos y pelamos 750 g de patatas. Las cortamos en cuartos y las cocemos en abundante agua con 1 cucharadita de sal, a fuego medio alto entre 20 y 25 minutos, o hasta que estén tiernas.
Una vez cocidas, escurrimos las patatas en un colador y las llevamos a un bol. Para hacer un puré gustoso, añadimos a las patatas cocidas pimienta negra recién molida, 1 pizca de nuez moscada, 40 g de mantequilla y 2 cucharadas de leche.
Usamos un pisapatatas o un pasapurés para hacer el puré de patatas. Con él, aplastamos las patatas e integramos y mezclamos todos los ingredientes del puré.
Mientras se cuecen las patatas para hacer el puré, podemos aprovechar para hacer el relleno de carne picada de pollo. Para ello cortamos en trozos pequeños 2 dientes, 1 cebolla y 1 zanahoria.
Calentamos 30 ml de aceite de oliva en una olla y pochamos los vegetales a fuego medio durante 10 minutos. Añadimos a las verduras un poco de sal y esperamos a que se doren antes de añadir la carne picada.
Añadimos a la olla 600 g de carne picada de pollo, un poco de sal y 1 cucharadita de orégano. Cocinamos la carne con los vegetales hasta que quede completamente hecha.
Vertemos 100 ml de vino blanco y dejamos que se evapore.
Añadimos a la salsa 400 g de tomate triturado.
Tapamos la olla y cocinamos la salsa durante 15 minutos a fuego medio, hasta que quede reducida.
Montamos el pastel salado. Para ello, cubrimos la base de una fuente de horno con el relleno de carne picada de pollo. Sobre este colocamos montoncitos de puré de patatas y lo extendemos de manera que todo el relleno quede cubierto.
Antes de gratinar el pastel, repartimos 75 g de mozzarella rallada por toda la superficie.
Llevamos el pastel al horno con la función de gratinar y lo horneamos a 200 ºC durante unos 5 minutos o hasta que el queso quede dorado. Servimos
Resumen fácil de preparación
- Cocemos las patatas
- Hacemos el puré de patatas
- Cortamos los vegetales
- Los pochamos
- Añadimos la carne, la sazonamos y la cocinamos
- Vertemos el vino y lo dejamos evaporar
- Añadimos el tomate triturado
- Tapamos y cocinamos el relleno
- Montamos las dos capas del pastel
- Repartimos el queso rallado por encima
- Gratinamos y servimos
