Cuando nos hemos puesto a escribir esta receta de pavo guisada al vino, lo primero que nos ha venido a la mente es una cosa: queremos que te apuntes este pavo en salsa porque se va a convertir en uno de tus habituales. Está cocido con una buena proporción de vino y eso hace que no sea igual que los demás. Al ser este ingrediente un poco ácido, le confiere una textura a la carne que nos gusta mucho y seguro que a ti te va a pasar igual. ¡Ya lo verás! Además, se trata de una elaboración muy versátil, pues te puede servir tanto para la comida de diario, llevarlo para comer fuera de casa o incluso disfrutarlo el fin de semana junto con la familia.
Para terminar la introducción, contarte algo importante. Aunque para ilustrar la receta hemos utilizado un vino blanco, perfectamente puedes optar por vino tinto. Los dos quedan muy bien, así que, ¡a tu elección! Cada uno tiene sus matices. Con el vino blanco queda una salsa suave y con el vino tinto se intensifica el sabor. Por otra parte, le hemos puesto un arroz blanco de acompañamiento, pero tampoco le cierres las puertas a una guarnición de patatas (en puré, fritas, al horno o al vapor) que le queda también fantástico.
Pues nada más. Espero que te hayamos dado ganas de ponerte manos a la obra con este plato. ¡Ya verás qué delicia!
Información de la receta
- Tiempo de preparación: 5 minutos
- Tiempo de cocinado: 45 minutos
- Tiempo total: 50 minutos
- Raciones: 4
- Categoría: plato principal
- Tipo de cocina: española
- Calorías por ración (kcal): 600
Ingredientes del pavo guisado al vino blanco para 4 personas
- 750 g de carne de pavo troceada para guisar
- Sal
- Pimienta negra molida
- 2 zanahorias
- 1 puerro
- 1 cebolla
- 2 o 3 dientes de ajo
- 4 cucharadas de aceite de oliva virgen extra
- 1 cucharada de harina de trigo
- 250 ml de vino blanco (o tinto)
- 250 ml de caldo de pollo
- 50 g de guisantes (frescos desgranados, congelados o de lata escurridos)
Para acompañar:
- 400 g de arroz blanco
Cómo hacer pavo al vino blanco
Para cocinar este delicioso plato vamos a necesitar 750 g de carne de pavo troceada para guisar. Lo primero que haremos con ella será revisarla y quitarle el exceso de grasa que pueda tener. Salpimentamos generosamente.
Ahora vamos a preparar las verduras de nuestro guiso. Pelamos y troceamos 2 zanahorias en rodajas o en medias lunas, dependiendo del grosor. También necesitamos 1 puerro, al que le retiraremos las hojas y limpiaremos para quitarles los restos de suciedad, 1 cebolla y 2 o 3 dientes de ajo, que tenemos que pelar. Picamos todo.
Una vez terminadas estas preparaciones previas, nos ponemos con los fogones. Engrasamos la base de la olla con una cucharada de aceite de oliva y la ponemos a calentar. Cuando haya cogido bastante temperatura, pero que no humee, ponemos a dorar en ella los trozos de pavo por ambos lados. Los retiramos y reservamos.
Bajamos el fuego y añadimos unas 2 o 3 cucharadas más de aceite de oliva para hacer el sofrito. En ella tenemos que rehogar las zanahorias, el puerro y la cebolla durante unos 10 minutos, para que, tanto la cebolla como el puerro queden bien tiernos. Removeremos con frecuencia para que no se queme.
Incorporamos el ajo, le damos unas vueltas y rehogamos 1 minuto o así. Enseguida, espolvoreamos con una cucharada de harina, mezclamos y dejamos que se cocine por un par de minutos para que pierda el sabor a crudo.
Volvemos a meter el pavo y, sin más tardar, lo mojamos con 250 ml de vino blanco (o tinto). Subimos el fuego, mezclamos bien y rascamos el fondo de la olla para quitar lo que se había pegado, ya que son restos que se han concentrado y le darán buen gusto a la salsa. Cuando rompa a hervir, dejamos que cueza 2 minutos destapado para que el alcohol se evapore.
Acto seguido, incorporamos 250 ml de caldo de pollo. De igual manera, esperamos a que rompa a hervir y luego, bajamos a fuego medio para dejarlo cocer durante 20 minutos, también destapado, removiendo de vez en cuando.
Cuando queden 10 minutos para terminar la cocción, echamos el puñado de guisantes. Probamos el guiso, rectificamos de sal y pimienta si fuera necesario, y continuamos la cocción hasta que la carne esté tierna. Se puede servir enseguida o dejar reposar hasta el día siguiente. Acompañamos con arroz blanco o cualquier otra guarnición a gusto de los comensales
Resumen fácil de preparación
- Retirar el exceso de grasa del pavo, salpimentar y reservar
- Trocear la zanahoria y picar el puerro, la cebolla y los ajos
- Engrasar una olla, sellar la carne por ambos lados y retirar
- Añadir el resto del aceite y pochar la cebolla, el puerro y la zanahoria
- Incorporar el ajo, rehogar 1 minuto, espolvorear la harina, mezclar y cocer 2 minutos
- Reincorporar el pavo, echar el vino blanco y dejar cocer 2 minutos
- Agregar el caldo de carne y cocer unos 20 minutos destapado
- En los últimos 10 minutos, añadir los guisantes y rectificar de sal y pimienta
