Si hay una pareja perfecta en el mundo vegetal es la de los garbanzos con espinacas. Pocas cosas hay tan reconfortantes como un delicioso potaje de garbanzos bien calentito en un día de invierno y si le añadimos además esta verdura, el resultado es insuperable.
La receta que aquí os presentamos es la versión simplificada partiendo de garbanzos ya cocidos y espinacas congeladas, lo que nos permitirá disfrutar de este delicioso plato en cualquier momento y en muy poco tiempo.
Si disponéis de tiempo suficiente y queréis llevar este potaje a otro nivel, no dudéis en elegir unos buenos garbanzos y cocerlos, previo remojo de doce horas. Si no es el caso, simplemente elegid una buena conserva de garbanzos de bote.
De igual forma, si no tenéis espinacas frescas, las espinacas congeladas dan muy buen resultado en esta receta. Las opciones son infinitas para disfrutar de este completo y delicioso plato en cualquier momento… ¡no hay excusas!
Información de la receta
- Dificultad: fácil
- Tiempo de preparación: 5 minutos
- Tiempo de cocción: 25 minutos
- Tiempo total: 30 minutos
- Raciones: 4
- Tipo de comida: plato principal
- Tipo de cocina: española
- Calorías: 90 kcal cada 100 g
Ingredientes del potaje de garbanzos y espinacas para 4 personas
- 400 g de garbanzos cocidos
- 200 g de espinacas congeladas
- 600 ml de caldo de ave
- 150 g de salsa de tomate casera
- 4 huevos
- 1 cebolla
- 50 ml de aceite de oliva virgen extra
- 2 dientes de ajo
- 1 sobre de azafrán
- 1 cucharadita de pimentón de la Vera
- ½ cucharadita de comino rallado
- Un toque de pimienta negra recién molida
- Sal al gusto
Cómo hacer el potaje de garbanzos, espinacas y huevo
En primer lugar, picamos la cebolla en brunoise y la ponemos a dorar durante unos cinco minutos, con el aceite de oliva virgen extra, en una sartén amplia, a fuego medio, removiendo de vez en cuando para que no llegue a tostarse.
Cuando la cebolla comience a estar dorada, añadimos la salsa de tomate y el ajo picado, removemos y dejamos reducir durante unos minutos.
Pasado este tiempo, añadimos las espinacas y removemos el conjunto, dejándolo cocinar durante diez minutos más.
Mientras tanto, ponemos los garbanzos con el caldo en una cazuela y llevamos a ebullición. Si utilizamos garbanzos en conserva, debemos aclararlos previamente bajo el grifo, con ayuda de un colador, para eliminar los líquidos de conservación, los cuales no nos interesan en esta preparación.
Acto seguido, añadimos a la cazuela con los garbanzos, el sofrito de espinacas. Mezclamos y añadimos el azafrán, el comino, la pimienta negra recién molida y rectificamos de sal si fuese necesario.
Cocinamos a fuego medio durante cinco minutos más, mientras que, en una cazuela aparte, cocemos los huevos durante este mismo tiempo.
Montamos el plato sirviendo una ración de potaje y un huevo cocido, con su yema semilíquida, cortado por la mitad.
Resumen fácil de preparación
- Picar y dorar la cebolla
- Añadir la salsa de tomate y el ajo picado. Dejar reducir. Añadir las espinacas y cocinar por 10 minutos
- Llevar a ebullición el caldo con los garbanzos. Añadir el sofrito de espinacas y cocinar el conjunto durante 5 minutos, mientras que en un cazo aparte, se cuecen los huevos durante el mismo tiempo
- Servir la ración de potaje con un huevo cocido partido por la mitad