El salmón Wellington es una deliciosa versión del clásico solomillo Wellington, que tradicionalmente se elabora con carne de ternera o cerdo que, en este caso, vamos a sustituir por salmón para hacer un Wellington de pescado.
Al presentarse en la mesa, este plato tiene un aire festivo, perfecto para ocasiones especiales, ya que su aspecto dorado y elegante llama la atención de todos los comensales. Además, es bastante fácil de preparar por lo que resulta una receta accesible para cualquier aficionado a la cocina.
El ingrediente principal de este plato es el lomo de salmón así que es fundamental contar con un producto fresco y de calidad para asegurar el mejor resultado. El relleno de salmón va acompañado con unas sabrosas espinacas salteadas combinadas con queso crema que aportan un toque suave y cremoso, aunque en lugar del queso crema, se puede usar una bechamel para conseguir un relleno más tradicional y con una textura algo distinta. En lugar de espinacas, también podemos acompañar el salmón con setas que combinan estupendamente con este pescado. Esta es una alternativa ideal para otoño, cuando las setas están de temporada.
En cuanto al hojaldre, hemos optado por utilizar hojaldre comercial para simplificar el proceso. Es recomendable elegir un hojaldre de forma rectangular, ya que facilita envolver el salmón sin tener que recortar ni manipular demasiado la masa, lo que puede afectar al resultado final.
Uno de los secretos para lograr que el hojaldre quede bien crujiente es asegurar que el salmón esté completamente seco antes de envolverlo ya que, el exceso de humedad puede afectar la textura del hojaldre y ablandarlo. Un truco eficaz para evitarlo es espolvorear un poco de pan rallado en la base del hojaldre antes de colocar el salmón, ya que ayudará a absorber cualquier humedad que pueda liberar el pescado durante la cocción.
Es importante también sellar bien el hojaldre, tanto para que se cocine de manera uniforme como para que conserve su forma en el horno. Si no está bien cerrado, puede abrirse durante la cocción, lo que afectaría a la presentación y a la textura de esta receta.
A la hora de decorar el hojaldre, podemos usar los recortes sobrantes de la masa para crear formas elegantes o bien, simplemente hacer unos cortes con un cuchillo en la superficie y sellar los bordes con un tenedor o con el dorso de una cuchara. Sea cual sea la decoración elegida, este salmón Wellington será sin duda una pieza central espectacular en cualquier mesa que sorprenderá a todos los comensales tanto por su sabor como por su vistosa presentación.
Información de la receta
- Tiempo de preparación: 20 minutos
- Tiempo de cocinado: 50 minutos
- Tiempo total: 1 hora y 10 minutos
- Raciones: 6
- Categoría: plato principal
- Tipo de cocina: británica
- Calorías por ración (kcal): 577
Ingredientes del salmón Wellington
- 2 cucharadas de aceite de oliva virgen extra
- ½ cebolla
- Sal
- 250 g de espinacas
- 50 g de queso crema
- 1 lomo de salmón de unos unos 600 g
- Pimienta negra recién molida
- 2 láminas de hojaldre rectangulares
- 1 cucharada de pan rallado
- 1 huevo
Cómo hacer salmón Wellington
Para comenzar a preparar el salmón Wellington, calentamos 2 cucharadas de aceite de oliva en una sartén. Picamos finamente ½ cebolla y la pochamos en el aceite caliente con una pizca de sal, hasta que quede bien dorada.
A continuación, añadimos 250 g de espinacas frescas y las salteamos a fuego alto integrándolas con la cebolla pochada.
Una vez mezcladas, incorporamos 50 g de queso crema, que aportará cremosidad a las espinacas. Retiramos la sartén del fuego y reservamos las espinacas salteadas con cebolla y queso para más adelante.
Mientras tanto, salpimentamos 1 lomo de salmón de aproximadamente 600 g asegurándonos de que esté limpio de espinas y sin piel.
Extendemos 1 lámina rectangular de hojaldre y espolvoreamos sobre él 1 cucharada de pan rallado. Este paso ayuda a evitar que el hojaldre absorba la humedad del salmón, lo que garantiza una base más crujiente. Colocamos el lomo de salmón sobre el hojaldre.
Distribuimos sobre el salmón la mezcla de espinacas reservada.
Con una segunda lámina de hojaldre, cubrimos el salmón. Recortamos los bordes con un cuchillo o un cortador de pizza y nos aseguramos de que el hojaldre quede bien ajustado, sin dejar aire en el interior. Esto permitirá que el hojaldre se cocine de manera uniforme y mantenga la forma sin expandirse. Sellamos los bordes con el dorso de una cuchara.
Con los recortes de hojaldre sobrante, podemos decorar la superficie dando rienda suelta a nuestra imaginación. En nuestro caso, hemos recortado la masa sobrante en círculos y hemos distribuido estos círculos de masa sobre la superficie para simular las escamas de un pescado. A continuación, batimos 1 huevo y pintamos con él toda la superficie del salmón Wellington para que adquiera un color dorado muy apetitoso.
Finalmente, horneamos el salmón Wellington durante 30 minutos a 200 ºC con calor arriba y abajo. Lo servimos recién hecho para disfrutar de un hojaldre crujiente y un relleno de salmón con unas espinacas cremosas en su punto.
Resumen fácil de preparación
- Pochamos la cebolla hasta que esté dorada
- Añadimos las espinacas frescas y las salteamos a fuego alto hasta que se integren bien
- Incorporamos el queso crema para darle cremosidad a la mezcla
- Salpimentamos el lomo de salmón, previamente limpio de espinas y piel
- Colocamos el salmón sobre una lámina de hojaldre previamente extendida
- Cubrimos el salmón con la mezcla de espinacas
- Tapamos con la segunda lámina de hojaldre, asegurándonos de sellar bien los bordes
- Decoramos con los recortes de hojaldre sobrantes y pintamos la superficie con huevo batido
- Horneamos el salmón Wellington durante 30 minutos a 200 ºC, hasta que esté dorado, y servimos
