En el mundo de la cocina se conoce como almíbar a una mezcla caliente de agua y azúcar que se utiliza en preparaciones de pastelería y repostería. Existen muchos tipos de almíbar en función de la proporción de agua y azúcar que contenga la mezcla, lo que cambia su consistencia.
Hacer almíbar en casa es muy fácil, la clave como decíamos estará en la proporción de los ingredientes en la mezcla y en la temperatura que alcance. Tener un termómetro nos ayudará a conseguir el punto perfecto del almíbar: flojo, hebra fina, gruesa, bola blanda, dura… Con cada tipo de almíbar podremos elaborar frutas en almíbar o confitadas, mermeladas, merengues, caramelos… El almíbar es ideal para calar bizcochos, que no es otra cosa más que mojarlos con algún líquido (para lo cual puedes usar aromatizantes o licores que añadan más sabor y complejidad), para preparar glaseados y frostings, para conservar frutas (las cerezas, el melocotón o la piña en almíbar son clásicos de los postres), para preparar siropes o para hacer caramelos. Y si lo haces casero, con el almíbar sobrante siempre podrás idear nuevos postres.
Sigue leyendo y descubre las mejores recetas con almíbar de la cocina. Descubre las recetas de todo tipo de tartas, cupcakes, pasteles, bebidas y otras delicias de sabor dulce e irresistible.