Podemos consumir el tomate de muchas formas diferentes, y es que este vegetal presenta una versatilidad culinaria idónea para idear todo tipo de elaboraciones. El tomate, además de en crudo, se puede procesar: la salsa de tomate es uno de los productos derivados que más se emplea en la cocina y que además mayores posibilidades ofrece, pues combina a la perfección en numerosas recetas tanto españolas como del resto del mundo.
Un sencillo plato de magro de cerdo con tomate, unas albóndigas, unas pechugas de pollo o un filete de ternera: esta salsa combina con todo y aporta ese sabor tan característico que nos apasiona una vez sentados a la mesa. Además, es una combinación económica con la que conseguimos platos sobresalientes. Por cierto, ¡el reposo suele sentar de maravilla a todas estas elaboraciones!
Si buscas ideas para cocinar carne con salsa de tomate sigue leyendo porque te presentamos las mejores recetas que puedes encontrar en la red, con información minuciosa de todo el proceso y consejos para hacer de ingredientes comunes auténticas maravillas.