La leche condensada es el resultado de extraer el agua de la leche de vaca y mezclarla con azúcar, lo que da como resultado una crema espesa y dulce, un derivado lácteo que se suele emplear en la elaboración de recetas de repostería y como endulzante en bebidas. Es un producto que nace de la necesidad de preservar la leche en buen estado, como muchos otros ingredientes de nuestra despensa cotidiana, ya que puede conservarse durante largos periodos de tiempo envasado mientras se preserve su sistema de conservación y no se haya abierto.
Los postres suelen ser las principales alternativas cuando buscamos cocinar con leche condensada. Es un ingrediente común a la hora de dar vida a tartas, flanes, helados o cremosas mousses de sabores variados. Sigue leyendo y descubrirás que se puede hacer mucho más que endulzar el café con la leche condensada.