Cuando aprieta el calor del verano todos pensamos en lo mismo: ¡polos! Este pequeño y helado placer culinario atravesado por un palo recuerda a playa, sol, noches tórridas y sabores de la infancia. ¿Por qué no convertir tu cocina en una heladería artesanal dedicada a los polos? Son un postre delicioso e ideal en verano, la piruleta más refrescante y más fácil de hacer.
Tenemos todo tipo de recetas de polos. Los sabores más clásicos siempre triunfan cuando quieres hacer polos para niños, pero si te atreves te proponemos polos con sabores menos habituales, con frutas exóticas, menta… El límite lo marca tu imaginación y el frío que haga en ese momento, aunque un polo es apetecible en cualquier momento del año y no solo en verano. Este postre helado resulta irresistible y los infinitos sabores existentes hacen las delicias de cualquiera. Mezclar, llevar al congelador y disfrutar.
¿Sabías que los polos fueron una invención accidental de Frank Epperson en 1905, y que el nombre viene de una empresa llamada así que los vendía y tiene registrada esa marca? Si no estás para curiosidades y te mueres por dar un lametazo a esta delicia helada, tenemos la receta que buscas, sigue leyendo.