El sésamo o ajonjolí es una semilla oleaginosa que se utiliza en la cocina internacional de muchas formas diferentes y muy apreciada por sus propiedades nutricionales. Es rico en ácidos grasos poliinsaturados omega 3 y omega 6 o en lecitina, y es una importante fuente de proteína vegetal, fibra y minerales. Con esa carta de presentación parece más que recomendable incorporarlo a nuestros platos pero, ¿cómo hacerlo aprovechando además todos sus beneficios?
Lo más habitual es consumir el sésamo molido, de forma que ayudamos al organismo a digerirlo y absorberlo. Si se consume el grano entero, se recomienda tostarlo antes para favorecer la liberación de sus grasas y masticarlo muy bien. También puede encontrarse en forma de aceite.
Sobre cremas, en ensaladas, como condimento de unas verduras, de carnes, de salsas como la popular tahini, para hacer pan o en postres dulces, ya sea un bizcocho, un yogur o un batido… El sésamo une a sus propiedades naturales una versatilidad en cocina fuera de toda duda, y para muestra esta colección de recetas que cuentan con él entre sus ingredientes y que puedes seguir para conseguir platos caseros y deliciosos.