La textura de esta tarta es muy cremosa gracias al chocolate blanco y al queso mascarpone que contrasta con su base crujiente de galleta.
Este postre es solo apto para aquellos a los que les pierde el dulce, aunque dudo que nadie le haga ascos a tal cremosidad.
La tarta la podemos servir sola o acompañada con fruta fresca como frambuesas o fresas, resulta un bocado irresistible. También la podemos acompañar con mermelada o con más chocolate si tenemos el día goloso.
Información de la receta
- Tiempo de preparación: 20 minutos
- Tiempo de cocinado: 30 minutos
- Tiempo total: 50 minutos (más tiempo de enfriado)
- Raciones: 10
- Categoría: postres
- Tipo de cocina: española
- Calorías por ración (kcal): 504
Ingredientes de la tarta de chocolate blanco
- 100 g de galletas picadas
- 55 g de mantequilla fundida y fría (para la base)
- 4 hojas de gelatina neutra
- 400 g de chocolate blanco
- 200 g de nata para montar (mínimo 35% de materia grasa)
- 50 g de mantequilla a temperatura ambiente
- 200 g de mascarpone
Utensilios necesarios
- Molde redondo de 18 cm de diámetro
Cómo hacer tarta de chocolate blanco
Mezclamos 100 gramos de galletas picadas con 55 gramos de mantequilla fundida y fría. Mezclamos bien hasta conseguir una textura como de arena húmeda.
Forramos y engrasamos el molde con spray desmoldante o mantequilla.
Vertemos la galleta en la base del molde y la alisamos bien, reservamos en la nevera.
Ponemos a hidratar 4 hojas de gelatina en agua fría y dejamos que se hidrate durante 5 minutos.
En un cazo, vertemos 400 gramos de chocolate blanco, 200 gramos de nata para montar y 50 gramos de mantequilla a temperatura ambiente. Llevamos a fuego bajo hasta que el chocolate se derrita por completo.
Escurrimos la gelatina y la ponemos en la mezcla de chocolate e integramos por completo.
Añadimos 200 gramos de queso mascarpone y mezclamos hasta tener una crema homogénea.
Vertemos la mezcla sobre la base de galleta y llevamos a la nevera mínimo 8 horas, o hasta el día siguiente, hasta que cuaje por completo.
Una vez cuajada, desmoldamos la tarta, la adornamos al gusto —en nuestro caso con unas frambuesas y unos trocitos de chocolate blanco— y la servimos fría o a temperatura ambiente.
Resumen fácil de preparación
- Mezclamos la galleta y la mantequilla fundida
- Forramos y engrasamos el molde
- Alisamos la galleta en la base del molde y reservamos en la nevera
- Hidratamos la gelatina en agua fría
- Calentamos el chocolate, la nata y la mantequilla hasta que se derrita el chocolate
- Integramos la gelatina
- Añadimos el mascarpone y mezclamos
- Vertemos sobre la galleta y dejamos cuajar al menos 8 horas
- Desmoldamos, adornamos y servimos
