San Prudencio es el patrón de la ciudad de Vitoria, en el País Vasco, y sus fiestas tienen lugar cada año el 28 de abril. Fue con motivo de dicha celebración que el consorcio de pasteleros vitorianos se reunió, a finales de los 70, para encontrar un postre que hiciera honor al patrón y que casara con los caracoles y los perrechicos, las setas de la región, cuya degustación es típica en esos días.
Y de esa reunión de pasteleros surgió la tarta de San Prudencio. Un postre que durante días llena las vitrinas más dulces de la ciudad, aunque también es muy sencillo de preparar en casa. Para describirlo brevemente, este pastel consiste en un bizcocho genovés, que es todo un clásico en repostería, y un relleno de nata y trufa. Como particularidad, el bizcocho se humedece con cava, que le da un toque diferente muy rico y sorprendente. Se recomienda tomarla lo más fría posible pero sin que esté congelada.
Información de la receta
- Tiempo de preparación: 30 minutos
- Tiempo de cocción: 35 minutos
- Tiempo total: 7 horas y 30 minutos
- Raciones: 8
- Categoría: repostería
- Tipo de cocina: vasca
- Calorías: 308 kcal por cada 100 g
Ingredientes de la tarta de San Prudencio para 8 personas
Para el bizcocho genovés:
- 3 huevos camperos a temperatura ambiente
- 90 g de azúcar
- 90 g de harina de repostería
- 1 pizca de sal
Para el relleno:
- 600 ml de nata para montar 35 % m. g. (fría de la nevera)
- 100 g de chocolate para postres
- 60 g de azúcar glas
- 150 ml de cava
Para decorar:
- Cacao puro en polvo
Cómo hacer la tarta de San Prudencio
Comenzaremos la elaboración preparando el bizcocho genovés. Para ello, primero ponemos a calentar el horno a 180 ºC. Luego, cascamos los huevos en un bol y los mezclamos con el azúcar y la pizca de sal. Después incorporamos aire batiendo con unas varillas hasta que los huevos hayan triplicado su volumen. Este paso es recomendable hacerlo con unas varillas eléctricas ya que puede tardar hasta 10 minutos.
Una vez batidos los huevos, vamos a tamizar la harina sobre ellos en tres veces. Hay que hacerlo con un tamiz o en su defecto pasarla por un colador fino en acero inoxidable.
La harina hay que incorporarla poco a poco con movimientos envolventes, a ser posible con una espátula en silicona.
Damián SerranoUna vez que tenemos la masa lista, forramos con papel de hornear la base de un molde redondo de 20 cm de diámetro y vertemos la mezcla en él. Las paredes del molde no hay que forrarlas ni engrasarlas ni nada, se tiene que dejar tal cual para que el bizcocho genovés se vaya pegando a ellas mientras sube.
Horneamos nuestro bizcocho en la altura más baja del horno durante unos 30 o 35 minutos. Sabremos que está hecho pinchando con un cuchillo en el centro. Si sale seco lo sacamos del horno. Si está manchado, continuamos el horneado unos minutos más y volvemos a hacer la prueba.
Damián SerranoUna vez fuera del horno, dejamos reposar dentro del molde unos minutos, hasta que podamos manipularlo sin quemarnos. Enseguida, pasamos un cuchillo alrededor del bizcocho para separarlo de las paredes del molde, lo desmoldamos, retiramos la hoja de papel de hornear y dejamos reposar sobre una rejilla unas 4 horas, hasta que se enfríe completamente. También podemos guardarlo en un recipiente hermético una vez frío y continuar la tarta al día siguiente.
Damián SerranoCortar el bizcocho por la mitad. Para que resulte más fácil, se pueden clavar palillos alrededor del bizcocho a la altura que tenemos que hacer el corte y utilizar un cuchillo largo de sierra para cortar guiándonos por los palillos.
Ahora vamos a montar y rellenar la tarta. Lo primero que tenemos que hacer es montar 550 ml de nata y, cuando esté semi-montada, añadimos los 60 g de azúcar glas y terminamos de montar.
Damián SerranoCogemos un molde redondo de 22 cm de diámetro con la base amovible y forramos las paredes con papel de hornear o, como en nuestro caso con acetato transparente para pastelería. Colocamos una de las capas de bizcocho en la base y la empapamos bien de cava.
Damián SerranoRellanamos la tarta con 300 g de la nata montada. Como el bizcocho es un poco más pequeño que el molde, procuraremos que la nata lo cubra bien por todos lados.
Ahora vamos a hacer la trufa. Para ello, vamos a poner a hervir los 50 ml de nata restante y a trocear el chocolate. Vertemos la nata sobre el chocolate, mezclamos y dejamos reposar 1 minuto. Pasado ese tiempo, mezclamos bien hasta que el chocolate se haya derretido. Si fuera necesario, lo pasamos al microondas 10 segundos.
Damián SerranoUna vez derretido el chocolate, lo vamos a incorporar a la nata restante poco a poco y con movimientos envolventes con la espátula de silicona.
Damián SerranoPonemos la segunda capa de bizcocho dentro de la tarta y la volvemos a empapar también con cava.
Damián SerranoCubrimos la tarta con toda la trufa y alisamos la superficie. Llevamos al congelador un mínimo de 2 horas.
Damián SerranoSacar del congelador y decorar la tarta con cacao en polvo. Es tradicional decorarla poniendo un papel de magdalena dado la vuelta u otra cosa que lo tape para dejar un círculo en el medio.
Damián SerranoPara servir, la tarta de San Prudencio se degusta mejor lo más fría posible, pero sin estar congelada, por lo que lo mejor es dejarla fuera del congelador unos minutos antes de servir.
Damián SerranoResumen fácil de preparación
- Poner a precalentar el horno a 180 ºC, batir los 3 huevos con el azúcar y la pizca de sal hasta que tripliquen su volumen
- Tamizar la harina
- Incorporarla poco a poco a los huevos con movimientos envolventes
- Transferir a un molde con la base forrada de papel de hornear
- Hornear a media altura en horno a 180 ºC
- Separar los bordes con un cuchillo, desmoldar y dejar enfriar sobre una rejilla
- Dividir el bizcocho en dos
- Montar 550 ml de nata con el azúcar glas
- Colocar una capa de bizcocho en un molde redondo con base amovible y mojar con cava
- Rellenar con 300 g de nata montada
- Colocar el resto del bizcocho y volver a mojar con cava
- Mezclar el chocolate troceado con los 50 ml de nata hirviendo
- Incorporar el chocolate derretido al resto de la nata montada
- Rellenar el pastel con la trufa y llevar al frigorífico 2 horas
- Por último, sacar del congelador, decorar con cacao en polvo
- Para servir, dejar la tarta fuera unos minutos para que esté lo más fría posible pero sin estar congelada