Los arándanos son unas frutas del bosque con un característico color azul oscuro y un sabor dulce con un pequeño toque ácido. Unas pequeñas bayas que crecen en arbustos y seguramente conoces ya pues también son famosas por ser una excelente fuente de antioxidantes. Originarios de América del Norte, hoy en día se utilizan en una gran variedad de platos, sobre todo postres y desayunos, pero también hay hasta salsas.
Para cuando quieras darte un capricho y disfrutar los arándanos en forma de bebida, te vamos a contar todos los detalles para preparar rápidamente y sin esfuerzo un jugo de arándanos. Básicamente lo único que vas a hacer es triturar y listo, pero no te quedes solo con este paso, anímate a seguir la receta en detalle para descubrir un par de consejos y que te quede aún mejor.
Hay que resaltar que el punto clave para que te quede un jugo bien rico es la calidad y, sobre todo, el sabor de los arándanos. Procura conseguir arándanos frescos y bien maduros, que tengan sabor intenso ya que de ellos depende el resultado. ¡Huye de los que no saben a nada!
Si donde haces la compra habitualmente no encuentras unos que te convenzan, una buena idea es probar con arándanos congelados, ya que se recolectan cuando están bien maduros y se procesan enseguida para minimizar la pérdida de sabor y de propiedades. ¡Tú eliges!
Información de la receta
- Tiempo de preparación: 5 minutos
- Tiempo total: 5 minutos
- Raciones: 2, 400 ml
- Categoría: bebidas
- Tipo de cocina: internacional
- Calorías por ración (kcal): 46
Ingredientes del zumo de arándanos para 2 personas
- 200 g de arándanos
- 350 ml de agua
- 1 cucharada de zumo de limón (opcional)
- Azúcar, miel u otro endulzante (opcional)
Cómo hacer zumo de arándanos
Para empezar, tomamos 200 g de arándanos frescos. Los lavamos bien bajo el grifo para quitar cualquier resto de tierra o impurezas. Una vez limpios, los echamos en el vaso de la batidora. A continuación, añadimos 350 ml de agua, asegurándonos de que los arándanos queden bien cubiertos.
Ahora, si queremos darle un toque cítrico, añadimos una cucharada de zumo de limón. Esto es opcional, pero le da un punto ácido muy agradable que contrasta con el dulzor natural de los arándanos. Además, el limón ayuda a preservar el color del zumo.
Damián SerranoActo seguido, cerramos la batidora y la ponemos en marcha. La dejamos triturar durante 1 o 2 minutos, para que los arándanos se deshagan completamente. Durante el proceso aparecerá espuma. No hay que preocuparse, esta va a desaparecer en los siguientes pasos.
Damián SerranoUna vez triturado todo, toca colar el jugo para eliminar los restos de piel y semillas. Para ello, colocamos un colador fino de acero inoxidable sobre un recipiente y vertemos el zumo poco a poco. Con la ayuda de una cuchara, un cazo o el pilón del mortero, ayudamos suavemente para que el líquido pase a través.
Así ya estaría listo y nos quedará un zumo con cuerpo. No obstante, si nos gusta un zumo más fino, podemos repetir este proceso una vez más o incluso usar una gasa de uso alimentario o colador para leches vegetales.
Damián SerranoPara terminar, probamos el zumo. Si lo encontramos un poco ácido o queremos suavizar su sabor, podemos añadir azúcar, miel o cualquier otro endulzante al gusto. Una vez a nuestro gusto, ya está listo para disfrutar.
Damián SerranoResumen fácil de preparación
- En el vaso de la batidora colocar los arándanos y el agua
- Añadir el zumo de limón
- Triturar durante un par de minutos
- Pasar por un colador
- Repetir el proceso si se desea textura más fina
- Endulzar al gusto y servir